La Pastoral de Movilidad Humana y el Consejo Ecuménico criticaron la poca voluntad de negociación de los Estados centroamericanos para la creación de polí­ticas que protejan la integridad de los migrantes indocumentados y sus familiares.

Mauro Verzeletti, de la Pastoral, dijo que las deportaciones se han generado bajo «cierto grado» de violencia, que el Gobierno de Estados Unidos justifica debido a su polí­tica estricta de seguridad nacional contra el terrorismo.

«Condenamos las polí­ticas del gobierno del Norte y las polí­ticas o la falta de los gobiernos de Centroamérica, la poca voluntad de negociación», dijo Verzeletti.

A criterio de Verzeletti la construcción de una polí­tica migratoria justa serí­a posible si los Estados centroamericanos conformaran un frente amplio de discusión con la participación de todos los sectores involucrados.

«En este momento de crisis internacional, los gobiernos se preocupan por salvar a los mercados, a los estafadores, a los bancos que siempre han estafado al pueblo; demandamos que la preocupación fundamental debe ser volcada hacia la salvación del derecho y la dignidad de la persona para que tenga trabajo, para que pueda vivir donde elija», refirió.

Las organizaciones urgieron a los Estados que «tomen en serio» la implementación de la Convención Internacional sobre la Protección de los Derechos de los Trabajadores Migrantes y sus Familiares.

«La gran mayorí­a de los paí­ses de la región que conforman la conferencia regional sobre migración, han ratificado este documento, pero han sido incapaces de ponerlo en práctica», aseguró Verzeletti.

Según la Pastoral, solo en 2008 más de 250 personas murieron durante su travesí­a. También se señaló el problema de los migrantes indocumentados que son cooptados, en muchas ocasiones, por el crimen organizado.

VíA CRUCIS

Con un minuto de silencio por los hechos recientes de violencia, dio inicio el Ví­a crucis del Migrante, que año con año celebra la Pastoral de Movilidad Humana y la Casa del Migrante, en el cual denuncian las violaciones a los derechos de los migrantes en su travesí­a hacia la búsqueda de mejores condiciones de vida.

«Queremos que el significado de las fronteras sea un significado de puentes de esperanza y solidaridad y no de muros que dividan la fe y la cultura de la humanidad en el mundo», señaló Verzeletti.

Según la Pastoral de Movilidad Humana, a la fecha han sido deportadas 6 mil 128 personas desde Estados Unidos; sin embargo, datos de Cancillerí­a detallan unos 8 mil 401 connacionales expulsados de ese paí­s.