Seis gobiernos europeos arrastrados por la crisis


Eduardo_Villatoro

Tuve la oportunidad de encontrarme en Barcelona el dí­a de las elecciones generales de España, el domingo 20, cuando los votantes le concedieron  holgada mayorí­a al Partido Popular que ha encabezado durante los últimos ocho años el conservador Mariano Rajoy, mientras que el Partido Socialista Obrero Español sufrió la peor derrota desde que se instauró la democracia en aquel paí­s europeo.

Eduardo Villatoro

 


La apabullante victoria del PP no puede calificarse tan simplistamente como una humillante derrota del PSOE y de su candidato Alfredo Pérez Rubalcaba, sino más bien fue un voto de castigo al aún presidente José Luis Rodrí­guez Zapatero, como consecuencia de la crisis económica y financiera que no logró superar, como tampoco pudieron encararla con éxito otros gobiernos europeos.

   El lunes 21, cuando tomaba el avión con destino a Parí­s, compré el ejemplar del diario El Paí­s, que dedicó alrededor del 90% de sus páginas a informar acerca de la rotunda victoria al empecinado Rajoy, así­ como incluyó análisis ponderados en torno al debacle del Partido Socialista, habiéndome llamado la atención un artí­culo de Sara España que tituló “Los electores han castigado ya a seis Gobiernos europeos por la crisis” y que inició con esta lapidaria frase: “Los electores no perdonan”. 

   En efecto, la analista polí­tica señaló que “desde que comenzó la crisis, los partidos en el Gobierno (de Europa) han ido cayendo en las urnas sin importar que fuesen conservadores o progresistas” Se remonta a mayo de 2010, cuando los Gobiernos de seis paí­ses de Europa (incluida España) han perdido las elecciones generales y en algunos casos con los peores resultados de la últimas décadas.

   A partir del año anterior, el Reino Unido, Holanda, Irlanda, Portugal y Dinamarca han cambiado el color polí­tico de sus Gobiernos “como castigo por la crisis económica”, y, de esa cuenta, los laboristas del británico Gordon Brown cosecharon en las elecciones del 6de mayo 2010 su peor resultado desde 1983 frente a los conservadores de David Cameron. En Holanda, el entonces primer ministro democristiano Jan Peter Balkenende registró una caí­da electoral que no habí­a sufrido durante los 23 años de vida de su partido.

   En Irlanda, los resultados de las elecciones generales de febrero de este año confirmaron el desplome del Fianna Fáil, partido dominante en la polí­tica irlandesa desde la Independencia, que fue castigado por la profunda crisis económica y financiera que vive el paí­s desde hace tres años. El Partido Socialista  portugués no habí­a registrado peor derrota en los últimos 20 años hasta las pasadas elecciones de junio. El primer ministro saliente José Sócrates fue el gran derrotado con el 28% de los votos, frente al casi 39% del Partido Socialdemócrata.

   Este fenómeno polí­tico electoral se repitió en las elecciones de Dinamarca que acabaron con 10 años sucesivos de Gobiernos de centro-derecha, apoyados por el populista Partido Popular Danés, obteniendo el triunfo el bloque opositor de centro-izquierda, encabezado por la socialdemócrata Helle Thorning-Schmidt.

   Al castigo de los electores en Europa –advierte Sara España-, hay que añadir la caí­da del Silvio Berlusconi, el aún primer ministro de Italia, el pasado 12 de este mes, después que la Unión Europea y los mercados pidieron su cabeza al presidente Giorgio Napolitano; misma suerte que corrió Yorgos Papandreu en Grecia.

   Hasta los poderosos Gobiernos de Alemania y Francia, de la canciller Angela Merkel y el presidente Nicolás Sarkozy, no han salido totalmente indemnes de la crisis, porque sus partidos han perdido elecciones locales frente a la oposición de centro-izquierda, lo que demuestra la inconformidad de los europeos ante el rigor de la crisis que golpea al Viejo Continente.

   (El antropólogo Romualdo Tishudo le pregunta al español Manolo Iturbiday, originario de Galicia, acerca de las caracterí­sticas del hombre primitivo, y el gallego responde -Se vestí­a de pieles y se refugiaba en las tabernas)