Seguridad desde las entrañas


Ismael Gómez Sánchez, O-16, 54132, ismael1968@intelnett.com

Pareciera ser que mientras más policí­as contratan y autopatrullas compran se incrementaran los delincuentes. Uno se pregunta, ¿el Estado estará contratando polincuentes y autorrobatrullas? Y es que el Estado está atacando delincuentes que son los frutos de una sociedad con malos principios y valores. Están atacando ladrones, secuestradores, asesinos. Esto jamás hará que se disminuya la delincuencia. El Estado debe atacar las causas que producen estas personas, lo que produce que los hombres se conviertan en delincuentes. El estado se debe (en función de un mapa de riesgo identificando áreas de riesgo social) enfocar en diseñar programas que contengan lo siguiente: Principios y valores espirituales, mejora de servicios públicos, inserción social, laboral, económica y cultural de estas áreas, legislación sobre libre asociación de maras, uso de tatuajes. Todo esto dado que la delincuencia nace del resentimiento provocado por la desintegración familiar, marginación social, maltrato infantil y otras condiciones que se crean en la infancia y juventud y en resumen, de la falta de solidaridad de los hombres con su prójimo.