Reciba, estimado lector, mis mejores deseos porque el año 2007 le traiga la satisfacción de sus aspiraciones y de bienestar personal y el de su familia. Triste es que el año 2006 se despida con otra mala noticia para los guatemaltecos, por la terquedad de quienes exprofeso ignoran el clamor popular, en especial de aquellos expertos en diseño urbanístico, que advirtieron que la calzada Aguilar Batres y su extensión de la Avenida Bolívar no iban a ser lo suficientemente anchas para dar cabida al Transmetro, perjudicando el paso libre, fluido y eficaz al tránsito de vehículos, causando con ello enormes problemas a la inmensa cantidad de vecinos tanto de carácter residencial, comercial, industrial y de toda índole, como de aquellos que tienen sus viviendas en municipios circundantes.
Antes escribí sobre el mismo tema, invitando a los lectores para que fueran a dar una vuelta por el lugar, para percatarse de las perjudiciales perspectivas que tenía el proyecto del Transmetro tal y como se había planteado, porque vendría a restar buen espacio libre para los vehículos de gran tamaño, que por ahí transitan mayoritariamente, ya que es la ruta de entrada y salida de la costa sur. Pues ahora, vuelvo a reiterar la invitación, para que por sí mismos puedan comprobar y sufrir el atasco generalizado que la arrogancia y prepotencia de los funcionarios municipales les impide ver lo que tanto se advirtió, puesto que en vez de mejorar sus condiciones para lograr un tránsito más fluido, representará aún más pérdidas de tiempo, dinero y esfuerzos de los guatemaltecos.
Tengo enormes dudas sobre el argumento esgrimido de que el Transmetro venga a beneficiar a quienes por su situación económica se ven forzados a utilizar un transporte colectivo, por cuanto no solo se ha demostrado que el Estado es un pésimo organizador y administrador de sus empresas, sino que ya se está viendo que perjudicará a las grandes mayorías que requieren con carácter urgente e indispensable que las vías de comunicación sean eficaces en todo el sentido de la palabra.
Lo advertimos, no era cierto que el Transmetro fuera a funcionar antes del inicio del ciclo escolar y por la lentitud de los trabajos existen serias dudas que empiece a finales del mes de enero entrante, salvo que se cometa la misma barbaridad que se hizo con los pasos a desnivel de Miraflores los que iniciaron a troche y moche, sin aviso previo, lleno de parches, de sitios altamente peligrosos e inexistentes o inadecuadas señales, tanto indicativas como de advertencia. Otra vez disculpen mi ignorancia pero sigo sin entender ¿por qué Su Muni no escucha, planifica ni atiende las sugerencias sobre sus obras municipales, cuando estas son hechas con los fondos aportados por los contribuyentes?