Se agrava crisis diplomática entre Egipto y Argelia


Policí­as egipcios hacen guardia en El Cairo, en prevención a posibles manifestaciones en protesta por la eliminación del equipo nacional de futbol. FOTO LA HORA: AFP /CRIS BOURONCLE

Declaraciones de Alaa Mubarak, hijo del presidente egipcio, y la quema de banderas argelinas frente a la embajada argelina en El Cairo, agravaron ayer la crisis diplomática entre Argelia y Egipto por los partidos de fútbol clasificatorios para el Mundial 2010.

Samer Al Atrush

El gobierno de Argelia por su lado convocó al embajador de Egipto en Argel para expresarle su «gran preocupación» frente a la «escalada» de la campaña mediática en Egipto, anunció en un comunicado el ministerio argelino de Relaciones Exteriores.

El equipo egipcio enfrentó actos de «terrorismo antes, durante y después del partido» el miércoles pasado en Jartum, declaró en un programa deportivo Alaa Mubarak, hijo mayor del presidente egipcio Hosni Mubarak.

En El Cairo, frente a la embajada de Argelia, los manifestantes quemaron banderas argelinas y lanzaron bombas incendiarias y piedras contra los policí­as que protegí­an la sede diplomática, indicó el ministerio del Interior egipcio.

Veinticuatro manifestantes y 11 policí­as resultaron heridos, según la fuente, que señaló la destrucción de 15 carros y varias vitrinas de comercios.

La policí­a decidió bloquear las calles adyacentes a la embajada para impedir nuevos incidentes, señaló el ministerio del Interior.

«Tenemos que tratar a Argelia como un paí­s que nos declaró la guerra», dijo a la AFP el manifestante Amr Higazi, un estudiante que llevaba un cartel pidiendo la expulsión del embajador argelino Abdelkader Hadjar.

Según el gobierno sudanés, cuatro personas fueron heridas en incidentes posteriores al partido de fútbol que Argelia le ganó 1-0 a Egipto.

Por su parte, el ministro egipcio de Salud, Hatem El Gabali habló de 21 «heridos leves».

La crisis diplomática comenzó el jueves cuando Egipto llamó a consulta a su embajador en Argelia y convocó al embajador argelino en El Cairo para protestar por los ataques contra locales de empresas egipcias en la capital argelina.

Pero la situación era tensa desde el jueves 12 de noviembre pasado.

Ese dí­a los hinchas egipcios hirieron a tres jugadores argelinos al apedrear el autobús que transportaba a la selección nacional argelina recién llegada a El Cairo para disputar el último partido de clasificación.

El secretario general de la Liga írabe, Amer Musa, pidió el viernes calma a egipcios y a argelinos.

«Llamo a la calle árabe a una vuelta a la calma y a la razón. El tema debe ser devuelto a su justa proporción, y los egipcios como los argelinos son árabes», declaró Musa a la AFP.