El entrenador alemán del Real Madrid, Bernd Schuster, empieza a ponerse nervioso a la espera de nuevos jugadores para reforzar su equipo, sobre todo un centrocampista, según la prensa española.
Con el título «La insatisfacción de Schuster», el diario madrileño El País afirmó que el actual campeón de la Liga española «no pone a disposición del técnico los jugadores que le prometieron».
Entre ellos el brasileño Kaká (AC Milán), el catalán Cesc Fábregas (Arsenal), el portugués Critiano Ronaldo (Manchester) o el holandés Arjen Robben (Chelsea), cuyos proyectos de traspaso se fueron desvaneciendo a medida que pasaron los días o tardan en concretarse.
El alemán Michael Ballack, cuyo nombre había aparecido en la agenda del club blanco, dijo que se quedaría en el Chelsea esta temporada, y el rumano Cristian Chivu se negó a fichar a pesar de que su traspaso del AS Roma al Real Madrid estaba cerrado.
A una quincena de días del inicio de la competitiva Liga, Schuster dispone de un equipo que brilló poco en los partidos de pretemporada y cuyos jugadores importantes están lesionados, como el holandés Ruud Van Nistelrooy, el argentino Gonzalo Higuaín o su nuevo fichaje, el alemán Christoph Metzelder.
Según el diario deportivo Marca, el entrenador alemán está «muy enfadado» y la directiva del club no sabe qué hacer frente a las exigencias financieras de los clubes contactados, especialmente el Chelsea por Robben, el FC Oporto por Ricardo Quaresma o el Feyernood por Royston Drenthe.
El Real Madrid sólo gastó por ahora 30 millones de euros por el defensa brasileño Pepe, y tiene recursos para fichar nuevos jugadores hasta el 31 de agosto, último plazo para los traspasos.
A pesar de que el tiempo apremia, el club espera atar a Robben esta semana, antes del partido de ida de la Supercopa de España, el sábado, contra el FC Sevilla.
Entre los otros nombres mencionados por los medios españoles figuran el holandés Wesley Sneijer (Ajax) y su compatriota Rafael Van der Vaart (Hamburgo).
El brasileño Julio Baptista, de vuelta de su cesión al Arsenal, podría quedarse, aunque había sido considerado transferible.