El alemán Michael Schumacher, heptacampeón mundial de Fórmula 1 que puso fin a su carrera al finalizar la temporada 2006, fue nombrado ayer por la noche ciudadano de honor de Maranello, la localidad del norte de Italia donde tiene su sede la Scuderia Ferrari.
Durante una ceremonia especialmente organizada en su honor en el auditorio Enzo Ferrari, Schumacher fue agasajado con una campana de bronce de 19 centímetros de alto, que simbolizaban sus victorias con la escudería italiana.
«Me siento sumamente honrado», dijo agradecido ’Schumi’. «Espero oír sonar esta campaña muchas veces en el futuro», añadió.
A los lados, la campana tiene inscritas las fechas del primer y del último Gran Premio que disputó Schumacher con la Scudería, el de Australia el 10 de marzo de 1996 y el Brasil el 22 de octubre de 2006. En la base, figuran las fechas de los cinco títulos mundiales que ganó con Ferrari.
Schumacher es la segunda persona que recibe ese privilegio, después de que hace cinco años fuera recompensado con ese honor el italiano Luca di Montezemolo, presidente de Ferrari.