La Superintendencia de Administración Tributaria anunció la creación de una Gerencia encargada de la fiscalización de entidades públicas y privadas que actualmente gozan de exención del pago de impuestos, arbitrios y otras contribuciones. La propuesta será presentada a finales de abril, ante el Directorio de la SAT.

El Superintendente de Administración Tributaria, Carlos Muñoz, informó que en la próxima reunión de Directorio, a finales de abril, propondrá la creación de una Gerencia encargada específicamente de fiscalizar a todos aquellos entes que gozan de exención de impuestos como las colegiaturas, iglesias, universidades o embajadas, para determinar la factibilidad de que tributen en un mediano o largo plazo.

Asimismo, dijo que tiendas, librerías, parqueos, ventas de discos, salones de belleza, carnicerías, entre otros negocios pequeños que actualmente no facturan al momento de comercializar sus productos o servicios, serán objeto de fiscalización por la nueva unidad.

“Ese es el objetivo de esta unidad. Controlar más a las unidades exentas a través de una gerencia específica para controlar ese sector. Aplaudo esta disposición porque va a contemplar controlar a los entes exentos para ver que todo lo que realmente tienen que facturar, lo facturen. Tengo que hacer lo que la ley me dice que haga”, argumentó Muñoz.

Según el titular de la SAT, el gasto tributario producto de las exenciones fiscales ascendió a Q20 mil millones en 2013, entre la exención fiscal del Impuesto al Valor Agregado y el Impuesto Sobre la Renta.

Sin embargo, mencionó que esta cifra habría que compararla con los beneficios para la población guatemalteca, especialmente la de escasos recursos, tanto en el sistema educativo como en la atención que reciben en los centros hospitalarios.

“Habría que determinar si con estas excepciones la gente de escasos recursos puede vivir bien también. No solo hay que ver el monto del gasto, sino el impacto del gasto”, subrayó el funcionario.

De conformidad con la legislación tributaria, se encuentran exentos al pago de impuestos: los centros educativos públicos y privados, las universidades legalmente establecidas en el país, la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala y Comité Olímpico; el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, las misiones diplomáticas acreditadas ante el Estado, las organizaciones religiosas y los organismos internacionales que realicen actividades de beneficio social o de apoyo a la gestión pública y el desarrollo económico y social.

Datos oficiales estiman que existen unas 150 mil entidades exentas de impuestos, las cuales empezarían a ser fiscalizadas por la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT).

El Fondo Monetario Internacional (FMI) cuestionó recientemente al Estado de Guatemala, por los privilegios otorgados por las exenciones tributarias, al considerar que no tienen una razón social y recomendó la supresión de las mismas.