La Unión Europea renunció hoy a abrir uno de los capítulos de las negociaciones de adhesión de Turquía con la UE, que Francia amenazaba con bloquear, primera demostración práctica de la oposición del presidente Nicolas Sarkozy al ingreso de Ankara al bloque europeo.
Los embajadores de los 27 países de la UE reunidos el lunes por la mañana en Bruselas dieron en cambio luz verde a la apertura de los capítulos «estadísticas» y «control financiero», informaron fuentes europeas.
La presidencia alemana de la UE, apoyada por la Comisión Europea, había previsto en principio abrir el martes con Turquía tres de los 35 capítulos del proceso de adhesión de ese país al bloque europeo.
Pero Berlín decidió retirar del orden del día de la reunión de embajadores del lunes uno de los capítulos, referente a «política económica y financiera», que Francia amenazaba con obstaculizar.
«Los Estados miembros necesitan más tiempo para encontrar un acuerdo sobre el tercer capítulo», explicó la portavoz del comisario europeo de Ampliación, precisando que las discusiones sobre ese tema continuaban.
«Alemania no lo puso sobre la mesa. No servía de nada meterlo e la agenda ya que no había unanimidad para abrirlo», indicó un responsable europeo, recordando la «reserva francesa sobre ese capítulo».
En efecto, el ministro francés de Relaciones Exteriores, Bernard Kouchner, había dejado entender la semana pasada que Francia sólo daría su acuerdo a la apertura de dos capítulos.
Antes y después de su elección a la presidencia francesa, Nicolas Sarkozy reiteró que no pensaba que Turquía «tenía su lugar en la Unión» y que prefería una «asociación privilegiada» de ese país con el bloque en lugar de una adhesión plena.
Turquía abrió en octubre de 2005 negociaciones de adhesión con la UE, que podrían durar por los menos 10 ó 15 años.
Desde 2005, sólo dos de los 35 capítulos fueron abiertos: ciencia e investigación y política industrial y empresa.