Sarkozy abandonó a pie el hospital Val de Grace poco después de las 11:00 horas locales, tomado de la mano con su esposa Carla Bruni, y tras despedirse de los médicos subió a su automóvil.
El Presidente se dirigió a la residencia oficial de la Lanterne, en el parque del castillo de Versalles, en las afueras de París, donde ayer sufrió una indisposición mientras practicaba deportes, indicó la cadena BFM-TV.
Según el comunicado oficial, el malestar no tenía causas cardíacas ni tendrá consecuencias.
«El diagnóstico es de un malestar lipotímico por un esfuerzo sostenido con un gran calor y sin pérdida del conocimiento, en un contexto de fatiga vinculado a una carga de trabajo importante», señala el comunicado.
Los médicos han recomendado a Sarkozy, de 54 años, algunos días de reposo.
«No se le ha prescrito ningún tratamiento médico. Se le ha aconsejado algunos días de reposo relativo. En esas condiciones, el desplazamiento previsto para mañana al monte Saint Michel (oeste), ha sido aplazado», añade el texto oficial.
Por el contrario, Sarkozy presidirá el tradicional consejo de ministros de los miércoles.
El ritmo de trabajo del mandatario fue reducido y por ello varias personalidades políticas que debían ser nombradas antes del miércoles como secretarios de Estado tendrán que esperar tal vez hasta fines de agosto.
Mientras se encontraba en el Hospital de Val de Grace, el Presidente se mantuvo informado acerca de la actualidad.
Sarkozy comenzó ya a seguir los consejos de «reposo relativo» que le dieron los médicos y por ello la ministra de Economía Christine Lagarde le reemplazó a mediodía en la firma de un acuerdo sobre préstamos a las empresas.
A fines de la semana debe viajar a Cabo Negre (sudeste de Francia) para pasar tres semanas de vacaciones en la residencia familiar de su esposa.
Los medios de comunicación franceses destacaron el lunes «la transparencia» del Palacio del Elíseo, que difundió rápidamente el domingo un comunicado sobre el malestar del mandatario en un lugar público, aun cuando ese boletín, ante la ausencia de exámenes médicos, era bastante lacónico.
Los medios también se refirieron a la «hiperactividad» de Sarkozy y algunos se interrogaban acerca de las implicaciones políticas e institucionales que podría tener este incidente.
Comunicado difundido hoy por Presidencia francesa antes de que el presidente Nicolas Sarkozy saliera del hospital militar de Val de Grace, en el sur de París, donde había sido internado ayer tras sufrir un malestar cuando hacía jogging.
«En acuerdo con las autoridades médicas que atendieron al presidente de la República en el hospital militar de Val de Grace, la Presidencia de la República informa:
La vigilancia cardiológica del presidente de la República ha concluido esta mañana. A primera hora de esta mañana se le ha efectuado una coronarografía. De la vigilancia y los estudios complementarios se desprende que el malestar no tiene ninguna causa cardiológica y tampoco consecuencia cardiológica. Ningún elemento electrocardiográfico evoca un disturbio del ritmo (ndlr: cardíaco).
Se ha confirmado (mediante análisis de sangre, electroencefalograma e IRM cerebral) que no hay causa ni consecuencia neurológica o metabólica.
Por lo tanto, el diagnóstico es de un malestar lipotímico por un esfuerzo sostenido con un gran calor y sin pérdida del conocimiento, en un contexto de fatiga vinculado a una carga de trabajo importante.
No se le ha prescrito ningún tratamiento médico. Se le ha aconsejado algunos días de reposo relativo. En esas condiciones, el desplazamiento previsto para mañana al monte Saint Michel (oeste), ha sido aplazado.
El jefe de Estado abandonará el hospital al promediar la mañana (del lunes). Como está previsto, el miércoles por la mañana presidirá el consejo de ministros.