El guatemalteco Andrés Saravia celebró ayer su campeonato en casa ajena, al triunfar en el Autódromo La Guácima y adjudicarse, de forma invicta, el Campeonato Centroamericano de Automovilismo.
En tanto, Amadeo Quirós, padre e hijo, fueron los mejores representantes nacionales del certamen, al lograr un segundo lugar en la fecha y subcampeonato.
Otros ganadores de la fecha fueron José Iturbide en la GT2, tras un intenso pulso con Mauricio Roque —ambos Porsche— y Carlos Hernández en la categoría menor.
En el primer heat de dos, Saravia demostró su superioridad y se separó del resto del grupo. Zaid defendió su segundo lugar de Quirós durante veinte minutos, hasta que cedió la posición y debió abandonar porque estalló uno de los neumáticos. Así, Raúl Sánchez pudo hacerse con el tercer lugar del lap.
La sorpresa en la GT2 fue la participación del panameño Javier Brandao, quien competía por primera vez en el certamen. Inicialmente la pelea estaba entre Mauricio Roque (pole) e Iturbide, y quien ganaba la jornada se dejaba el título.
El canalero ganó la partida, Roque logró ser segundo e Iturbide relegado a la tercera posición. Esto dejaba a Roque a muy poco del anillo de campeón.
En la GT3, Juan Ignacio Pérez hizo volar el Toyota Altezza y tras él se ubicó Carlos Hernández, aunque sin posibilidad de darle cacería. Atrás, Fernando Saravia mantuvo a raya a Marco Morales, ya que el título estaba entre ellos dos.
Para la segunda largada, vino la lluvia y con eso la estrategia del tipo de llantas a utilizar, tema que resultó determinante.
En la GT1, Saravia bajó el ritmo y Amadeo hijo se pegó al bumper trasero. Manejando al extremo, cometió un error y entrompó a mitad de carrera, así perdió mucho tiempo con respecto a Saravia, pero no la posición. Carlos Rodríguez entró tercero.
En la GT2, Brandao sufrió en exceso con la lluvia y perdió el protagonismo de la primera largada. Roque se fue al frente e Iturbide tras él, y esa fue la constancia durante un 95% de carrera. En los últimos minutos, Iturbide rebasó, Roque devolvió el rebase e Iturbide adelantó de nuevo.
Con la bandera de cuadros ya ondeando, Iturbide aceleró y entró junto con Roque, ganando apenas por medio carro. De las categorías, la más pareja y espectacular por el cierre.
En la GT3, Pérez tuvo dificultades con el auto y el protagonismo recayó en Carlos Hernández con el beneplácito del piloto. Pero, conforme se fue secando la pista el panameño Roberto Carles iba siendo más rápido —usó llantas para seco— y adelantó sin dificultad a Hernández.
Marco Morales llevaba el tercer lugar, pero en un roce con Hernández perdió el control y salió de la pista. Esto abrió la puerta para que Marco Castro ascendiera al tercer puesto de la clase en la última vuelta.
Andrés Saravia en la GT1, José Iturbide en la GT2 y Fernando Saravia campeones; todos guatemaltecos. ¡Ya se les está haciendo costumbre!