Sandra Bullock, Una chica mala


«Me lo he pasado muy bien siendo mala y dura», confesó Sandra Bullock en Madrid, donde presentó su nueva pelí­cula La proposición, en la que interpreta a una ejecutiva que pacta con su empleado (Ryan Reynolds) una boda de conveniencia para no ser deportada a Canadá.


Derrochando simpatí­a añadió: «Si preguntas a mi marido si tengo un lado oscuro, seguro que te dirá que soy una hija de puta de mucho cuidado, pero al ser tan buena actriz parezco encantadora».

La actriz llevaba año y medio sin trabajar. «He tenido que regresar a la escuela y volver a hacer castings para buscar otro tipo de trabajos porque la gente me habí­a encasillado con un tipo de papeles que ya me aburrí­an y no podí­a más», confesó.