El futbolista del Real Madrid Cristiano Ronaldo fue sancionado hoy con tres partidos de suspensión por el Comité de Competición de la Real Federación Española de Futbol (RFEF), una sanción que el club blanco tiene previsto recurrir.
«Es un error», aseguró hoy a los periodistas el vicepresidente del Real Madrid Fernando Fernández Tapias.
Primero, el comité le impuso al portugués un encuentro de castigo por la tarjeta roja que vio el domingo durante el encuentro ante el Athletic de Bilbao al enfrentarse al futbolista Ander Iturraspe. Y segundo, añadió otros dos partidos por el gesto que hizo al abandonar el campo, cuando se tocó la mejilla en repetidas ocasiones.
Cristiano Ronaldo cumplirá estos tres encuentros de sanción en la Liga española (ante Villarreal, Getafe y Elche), pero a cambio podrá jugar hoy ante el Atlético de Madrid la ida de las semifinales de la Copa del Rey.
Si el portugués hubiera sido sancionado con más de tres partidos, el castigo abarcaría también el torneo de Copa.
Pero el Real Madrid no se siente satisfecho con la resolución. Una a una, Competición fue desestimando las alegaciones presentadas por el club blanco y apoyó inequívocamente a Ayza Gámez, el árbitro del encuentro y otro de los focos de la polémica.
El asunto se fue enredando progresivamente desde el mismo momento en que ocurrió la acción hasta ahora, con la publicación de la sanción.
En la segunda parte del encuentro jugado el domingo, Cristiano Ronaldo tuvo una fricción con el defensa Carlos Gurpegui, quien se fue al suelo por una presunta agresión del portugués. Luego llegó el futbolista local Ander Iturraspe, quien puso su frente contra la de Cristiano Ronaldo y éste lo apartó con su mano izquierda.
Cuando todos creían que Gámez había juzgado la primera acción con Gurpegui, el árbitro sorprendió a todos cuando a requerimiento del Comité de Competición aclaró que la expulsión de Cristiano Ronaldo fue como consecuencia de la disputa con Iturraspe.
Respecto al primer castigo de un partido, el comité de la RFEF destacó que «resulta inequívoca la existencia del hecho reflejado en el acta, consistente en gesto violento y, por ende, antideportivo de la mano izquierda» puesta por Cristiano Ronaldo sobre Iturraspe.
El gesto final del portugués llevándose la mano a la mejilla fue merecedor de dos encuentros más de castigo al ser considerado como «desconsideración o menosprecio».
El Real Madrid alegó que Cristiano Ronaldo no dirigió este gesto al cuarto árbitro, como reflejó el acta arbitral, pues el colegiado de la zona técnica se encontraba despaldas.
Pero el Comité de Competición insistió en que «una acción dirigida hacia alguien no tiene por qué ser necesariamente constatada, apreciada o visualizada por su destinatario».
Ahora se espera que el Real Madrid presente recurso ante el Comité de Apelación, que se reunirá el viernes, y en último caso acudiría al Comité Español de Disciplina Deportiva para intentar que le concedan la suspensión cautelar de la sanción.
La polémica llega en un momento en el que el Real Madrid ya comunicó hace días a la RFEF su intención de proponer reformas relativas a la designación y promoción de los colegiados, entre otros aspectos relativos al colectivo arbitral.