Rusia empezó a suministrar combustible nuclear a Irán


Mahmud Ahmadinejad, presidente de Irán, fortaleció hoy su plan nuclear, al recibir la cooperación de Rusia.

Rusia anunció hoy el comienzo del suministro de combustible nuclear a la primera central de este tipo de Irán, haciendo así­ caso omiso del temor de Estados Unidos e Israel ante la presunta ambición iraní­ de dotarse de la bomba atómica.


«El 16 de diciembre, Atomstroiexport empezó a suministrar combustible para iniciar la actividad de la futura central nuclear de Buchehr, que se construye en Irán con especialistas rusos bajo el control de la AIEA (Agencia Internacional de Energí­a Atómica)», señaló la corporación estatal rusa en un comunicado.

«El suministro se llevará a cabo por etapas en los próximos dos meses», agregó la nota al precisar que Buchehr empezará a generar electricidad en aproximadamente un plazo de seis meses.

La futura central es la principal baza de las ambiciones nucleares del presidente iraní­, Mahmud Ahmadinejad.

Sin embargo, Israel y los gobiernos occidentales, encabezados por Estados Unidos, sostienen que el verdadero propósito de la instalación es ser una tapadera para la fabricación de bombas atómicas.

Rusia siempre ha afirmado que no existe evidencia de tal propósito. Esta posición se vio apoyada a principios de diciembre por un informe estadounidense según el cual Irán paralizó sus programas nucleares militares en 2003.

Respecto a los suministros, el ministerio ruso de Relaciones Exteriores los confirmó en un comunicado y subrayó que se realizarán bajo el control de la AIEA y que el combustible usado en Buchehr será «llevado de vuelta a Rusia para ser reprocesado y almacenado» de forma que no se extraví­e.

«Contenedores de combustible previamente sellados por inspectores de la AIEA llegaron al lugar y fueron colocados en un depósito especial bajo garantí­a de la AIEA», precisó la nota de Atomstroiexport.

El primer cargamento contiene 163 contenedores principales y 17 de reserva con uranio U-235 enriquecido al 3,62%.

Rusia e Irán anunciaron el jueves haber alcanzado un acuerdo sobre una agenda para terminar la central Buchehr (sur), un proyecto en el que Rusia reemplazó a Siemens en 1994 y que ya sufrió retrasos en varias ocasiones.

La puesta en servicio de la central se fijó en un primer momento para finales de 2007 pero fue aplazada a 2008 por supuestos problemas de financiación por parte iraní­, según una versión rusa que Teherán desmintió.

«La cooperación ruso-iraní­ en la central nuclear de Buchehr demuestra visiblemente que se pueden realizar los planes nacionales de desarrollar el sector de la energí­a atómica civil», aseguró la nota ministerial de Moscú.

Pese a las protestas de Estados Unidos, Rusia no sólo ha proseguido con su ayuda a los iraní­es en la construcción de Buchehr sino que también les ha vendido misiles anti-aéreos que el régimen de los ayatolás habrí­a desplegado para proteger la futura central nuclear.

Las potencias occidentales, bajo el impulso de Estados Unidos, presionan actualmente para que la ONU se pronuncie a favor de una tercera tanda de sanciones contra Irán.

Sin embargo, Ahmadinejad afirmó que una nueva resolución contra Irán «está fuera de cuestión».

Ahora, el comienzo del suministro ruso a Buchehr parece alejar la posibilidad de esas nuevas sanciones. Rusia tiene derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU al igual que China, otro aliado de Irán.

Por su parte, el diario israelí­ Maariv publicó el fin de semana que una delegación israelí­ viajó a Washington la semana pasada «para probar a los estadounidenses que el programa nuclear militar iraní­ está aún en desarrollo».

Confirman entrega

El director de la Agencia Iraní­ de la Energí­a Atómica Gholam Reza Aghazadeh confirmó el lunes que Irán recibió su primera entrega de combustible nuclear de origen ruso para su central de Bouchehr (sur), según la agencia oficial Irna.

«El primer cargamento llegó a Irán el lunes», dijo Aghazadeh, mientras Rusia anunció un poco antes que comenzó el domingo el suministro de combustible.

«La transferencia del combustible sigue y será entregado todo a Irán según el calendario previsto», agregó Aghazadeh.

Rusia habí­a declarado que esta entrega se efectuará en dos meses.