Los Chicago Bears y los Indianápolis Colts se clasficaron a la 41 edición del Superbowl de football americano, tras derrotar ayer a sus respectivos rivales Saints de Nueva Orleans y Patriots de Nueva Inglaterra.
Los Osos de Chicago ganaron a domicilio el título de la Conferencia Nacional con un triunfo aplastante sobre los Saints de Nueva Orleans 39-14, mientras los Potros de Indianápolis se coronaron en la Americana al vencer 38-34 a los Patriotas.
La final por el campeonato se jugará el 4 de febrero en Miami.
El partido en Chicago se jugó bajo una persistente y fina nevada y temperaturas muy frías de 3º Celsius, pero aún así el quarterback de los Osos, Rex Grossman, encontró un terreno fértil para realizar su mejor juego en cuatro años en la Liga.
Grossman se recobró de un pobre arranque y logró completar 11 de sus 26 pases para 144 yardas sin intercepciones.
Su pase de 33 yardas que Bernard Berrian convirtió en touchdown a 37 segundos de comenzar el cuarto final, puso delante a los Bears 25-14.
Los Santos, que jugaron su primera final de la Conferencia Nacional en 40 años de historia de la franquicia, vieron derrumbadas sus esperanzas con esa anotación.
Los Bears avanzaron a su primer Supertazón desde 1985, cuando ganó el título nacional bajo las órdenes del técnico Mike Ditka.
Por primera vez en la historia de la NFL los dos equipos que disputarán el Supertazón serán dirigidos por dos técnicos negros.
A primera hora Lovie Smith se había convertido en el primer entrenador negro que avanza a un Superbowl, en sólo su tercera temporada en la Liga. Horas después Tony Dungy, el timonel de los Colts, entró en la historia por la misma puerta.
«Una gran cantidad de entrenadores han estado antes de mí y ellos me dieron esta oportunidad», dijo Smith. «Espero que mi esfuerzo sirva de inspiración a otros».
De su lado, Dungy señaló que «estas cosas le ponen a pensar a uno. Estoy orgulloso de representar a los técnicos afroamericanos y orgulloso también por Lovie».
En Indianápolis el tiempo fue más benigno, aunque igual de frío, y ello no perjudicó al mariscal de campo Peyton Manning para encaminar a sus Colts a la final del campeonato con una genial jugada a 32 segundos del final.
El dos veces Mejor Jugador de la NFL Manning organizó el mayor regreso de los suyos al choque por el campeonato conferencial cuando los Colts descontaron una diferencia de 18 puntos.
La victoria fue especialmente dulce para Manning, cuya derrota en un único viaje a la final de la Conferencia Americana fue precisamente ante los Patriotas, en 2003.
El partido parecía decidido cuando un gol de campo del novato Stephen Gostkowski, a 3:49 del final, puso delante a los de Nueva Inglaterra 34-31.
Empero, Manning comenzó a recuperar terreno y con varias jugadas creó la situación para que Adam Vinateri pateara el gol de campo que le selló el triunfo a los Potros.
Vinateri no falló ninguna de las seis veces que pateó el balón, con cuatro goles de campo incluidos.