Nico Rosberg se impuso ayer un accidentado Gran Premio Británico de Fórmula Uno, en el que el triple campeón mundial Sebastian Vettel tuvo que abandonar a 10 vueltas del final por dificultades mecánicas.
SILVERSTONE / Agencia A
La tónica de la carrera fueron los problemas de neumáticos que afectaron a varios pilotos, incluso Lewis Hamilton, que partió primero. Pero Rosberg supo sortearlos para ganar su segunda competencia del año y tercera de su carrera.
El alemán Rosberg cruzó la meta delante del australiano Mark Webber, de Red Bull, que se repuso de un choque con el francés Romain Grosjean, de Lotus, poco después del comienzo.
El español Fernando Alonso, de Ferrari, superó a Kimi Raikkonen, de Lotus, faltando dos vueltas para llegar tercero.
La victoria probablemente se verá empañada por la profusión de neumáticos reventados que afectaron a cuatro pilotos, incluso Hamilton cuando iba en la punta en la octava vuelta.
«Fantástico, esto es muy especial», se entusiasmó Rosberg, que también ganó el año pasado en Mónaco y en China. «Nuestro equipo ha hecho un trabajo fantástico. Tenemos un gran impulso en este momento y estamos progresando todo el tiempo».
Parecía que Hamilton se encaminaba al triunfo ya que tuvo una gran largada y parecía ir aumentando su ventaja sobre Vettel. Pero en la octava vuelta reventó su neumático posterior izquierdo y se vio obligado a parar en los puestos. Dos vueltas después, Felipe Massa, de Ferrari, también perdió su neumático posterior izquierdo e hizo un trompo. Y cinco vueltas después, Jean-Eric Vergne, de Toro Rosso, perdió el neumático posterior.
Eso movilizó al auto de seguridad hasta la vuelta 22 cuando se reanudó la carrera normalmente.
También hizo que varios pilotos advirtieran después de la carrera los peligros de los reventones de neumáticos, que afectaron al piloto mexicano Sergio Pérez, de McLaren, el sábado y domingo. Pérez debió abandonar a seis vueltas del final.
Rosberg dijo que la cuestión debe investigarse. Los problemas de neumáticos han sido una preocupación durante toda la temporada, y varias escuderías, encabezadas por Red Bull, se quejan de que las gomas Pirelli se desgastan demasiado rápidamente y obligan a los pilotos a detenerse más en los puestos que en temporadas anteriores.
Alonso admitió que estaba «asustado» después que atravesó una lluvia de restos del neumático de Pérez, mientras Rosberg reclamó medidas para prevenir una situación similar en Alemania el próximo fin de semana.
Hamilton estaba furioso después de la carrera.
«La seguridad es la preocupación principal. Es inaceptable», dijo Hamilton a la BBC. «Cuatro reventones son inaceptables. Recién después que alguien se hiere se deciden a hacer algo al respecto. Creo que es una pérdida de tiempo hablar con la FIA (la federación internacional del deporte) y si no hacen nada eso dirá mucho sobre ellos».
La FIA ordenó que Pirelli asista a una reunión el miércoles en Alemania para tratar el asunto.
Vergne, por su parte, comentó que «es una vergüenza que este tipo de problema desperdicie todo un fin de semana de trabajo del equipo. Estoy muy disgustado y hay que hacer algo pronto».
La BBC mostró imágenes en la cuarta curva del circuito de Silverstone, donde ocurrieron algunos de los incidentes.
Después de reanudarse la carrera, Vettel empezó a aumentar su ventaja sobre Rosberg y pareció encaminado a la victoria. Pero en el giro 42, su auto se detuvo después que se rompió la quinta velocidad y Rosberg pasó al frente. El auto de seguridad volvió a entrar.
Alonso fue uno de los más agresivos: sobrepasó la McLaren de Jenson Button, el Force India de Adrian Sutil y finalmente a Raikkonen para quedar tercero. Webber también superó a Raikkonen para el segundo puesto faltando cuatro vueltas.
Pese a su salida temprana, Vettel sigue al frente en el campeonato mundial de pilotos con 132 puntos. Pero su ventaja se redujo ahora a 21 puntos sobre Alonso, que tiene 111. Faltan once carreras en la temporada. Raikkonen está tercero con 98 y Hamilton cuarto con 89.
La próxima competencia es el Gran Premio de Alemania el 7 de julio.