Rivalidad entre Toronto y Venecia


La colaboración entre el Festival de Cine de Toronto (TIFF) y la Muestra de Venecia, dos grandes citas del séptimo arte en otoño, tiene el mar de fondo de una instalada rivalidad por conseguir las mayores producciones estadounidenses, según la prensa especializada.


La revista cinéfila Variety sembró cizaña esta semana al citar al director artí­stico de la Muestra de Venecia, Marco Muller, lamentándose de las presiones del Festival de Toronto sobre los productores estadounidenses.

En su 65a edición, la «Mostra» italiana es uno de los más importantes festivales de cine y luce como una experimentada señora al lado de la joven TIFF, que cumple 33 años.

A diferencia del prestigioso palmarés veneciano, Toronto no tiene competencia oficial, por lo que tiene un aire más descontracturado que su homóloga de Italia.

La Mostra terminó este viernes con la notable actuación del estadounidense Mickey Rourke en el filme «The Wrestler» de Darren Aronofsky. Cada año, su clausura coincide con el inicio del festival de Toronto, que se ha impuesto como el mayor festival de América del Norte.

«La diplomacia entre los festivales de cine sobrepasa a veces la de los embajadores en la ONU. Raramente el jefe de un festival critica a otro. Pero está claro que el TIFF comienza a sentirse molesto porque Venecia es más agresiva en su búsqueda de estrellas y producciones de Hollywood», señala el diario Toronto STAR.

«Encontrarán en la selección del Festival de Toronto 24 filmes que fueron presentados en estreno mundial en Venecia», dijo esta semana a la AFP Muller, defendiendo su programación, que habí­a sido acusada de escasa comparado con años anteriores.

Toronto habí­a presentado el año pasado el estreno mundial de «Eastern Promises» de David Cronenberg, pero este año la lista de estrenos parece aventajar a Venecia, que acogió «Burn after reading», comedia de los hermanos Ethan y Joel Coen, con Brad Pitt y George Clooney, «Rachel Getting Married» del estadounidense Jonathan Demme y «The Wrestler», de Darren Aronofsky.

Esta rivalidad pudo haber sido atizada por la huelga de guionistas que paralizó el invierno pasado el sector audiovisual estadounidense, lo que redujo la cantidad de obras disponibles para los dos festivales.

Por otra parte, ambas ciudades trabajan en la edificación de nuevas instalaciones. La Bell Lightbox debe acoger el encuentro de Toronto hacia 2010, mientras Venecia prevé la construcción de una nueva versión del Palazzo del Cinema para 2011.