La secretaria de Estado estadounidense Condoleezza Rice, quien realiza de nuevo una gira por Oriente Medio para tratar de impulsar el proceso de paz entre israelíes y palestinos, se entrevistaba en Ammán con el presidente palestino, Mahmud Abas, y el rey Abdala II de Jordania.
Rice pretende reactivar el proceso basándose en una oferta de paz árabe propuesta en 2002 y respaldada hoy por los cancilleres de los países árabes en una reunión en Riad.
Hoy por la tarde, la secretaria de Estado prevé viajar a Israel para reunirse con el primer ministro, Ehud Olmert.
El encuentro de Rice con Abas hoy sería el segundo en 24 horas.
Se trata de la tercera etapa de la gira de Rice por Oriente Medio, con la que quiere reactivar el proceso de paz, en punto muerto desde hace seis años.
Según varios responsables estadounidenses, la secretaria de Estado defiende la diplomacia «paralela», con encuentros con Olmert y Abas.
«Estamos en una situación que justifica un enfoque bilateral, que creo que es el mejor, en el que paralelamente mantengo conversaciones con las dos partes para encontrar una visión común», explicó Rice ayer.
Pero la tarea no es fácil, ya que Olmert y Abas se acusaron mutuamente ayer de violar sus compromisos.
Sin embargo, el primer ministro israelí se mostró dispuesto hoy a participar en una eventual reunión con los países árabes moderados si es invitado.
Para crear confianza entre los movimientos palestinos Fatah y Hamas, que recientemente formaron un gobierno de coalición, Rice busca el apoyo de los países árabes, a los que ayer pidió que se comprometan al máximo para llegar a un acuerdo entre palestinos e israelíes.
Ayer se reunió con Abas y Olmert tras los encuentros el sábado en Egipto con responsables de cuatro países árabes aliados de Washington.
El rey de Jordania, que recientemente pidió a Estados Unidos que «se arriesgue» para ayudar a conseguir un acuerdo de paz, hablará con Rice del «compromiso estadounidense» al respecto, declaró un responsable del palacio real.
También abordarán la iniciativa de paz árabe, de inspiración saudí, que fue adoptada en 2002 en la cumbre árabe de Beirut y respaldada hoy por los cancilleres de los países de la región.
Esta iniciativa «es el marco adecuado para el proceso de paz», aseguró.
Se espera que el plan sea respaldado esta semana en la cumbre árabe de Riad.
La oferta de paz prevé el reconocimiento de Israel por parte de los países árabes a cambio de la retirada israelí de los territorios palestinos ocupados desde 1967, la creación de un Estado palestino y la solución de la cuestión de los refugiados palestinos.
Rice explicó en Egipto, en un encuentro con responsables de Jordania, Emiratos írabes Unidos, Arabia Saudita y ese país, que quería contribuir a impulsar la iniciativa árabe de paz.
Este plan, que fue rechazado por Israel en 2002, cada vez interesa más a los responsables israelíes.
«Si los países árabes moderados hacen avanzar el proceso siguiendo la iniciativa saudí, lo consideraré muy positivo», declaró Olmert hoy.
Varios responsables israelíes estimaron que la oferta árabe podría ser un punto de partida de las negociaciones si ésta especifica que los refugiados palestinos regresan a zonas controladas por los palestinos y no a Israel. Pero los dirigentes árabes se niegan a modificar la propuesta.