Luego de esperar meses para ser reconocidos, ocho de los once cuerpos de los guatemaltecos identificados vinieron esta mañana en una avioneta de la Fuerza Aérea Mexicana y fueron recibidos con honores de Estado, encabezados por el vicepresidente Rafael Espada.

En busca del «sueño americano» fueron once los guatemaltecos identificados como ví­ctimas de la matanza perpetrada por el crimen organizado en el Estado de Tamaulipas, al noreste de México, masacrados junto con 72 inmigrantes.

Esta mañana con una hora de retraso, a las 10 horas, llegaron a Guatemala los cuerpos de ocho migrantes asesinados, entre los cuales hay una mujer y un menor de edad.

Las ví­ctimas son: Efraí­n Pineda Morales, José David Girón Martí­nez, Richard Pineda Lacán, Mayra Cifuentes Pineda, Robin Estuardo Zúñiga Mijangos, Luis Humberto ílvarez Contreras, Gelder Lizardo Boche, que este mes cumplirí­a 18 años, y Byron Mauricio Berdúo Agustí­n.

En la base aérea se preparó el espacio para que las familias presencien los honores concedidos y luego de una ceremonia especial posteriormente se procedió a entregar los ocho cadáveres repatriados a sus respectivos familiares, quienes los transportarán en vehí­culos de las Fuerzas Armadas a sus lugares de origen.

MíS CUERPOS

El ministerio de Relaciones Exteriores informó que Guatemala espera información de otras seis personas, puesto que las familias notificaron a esa cartera que sus seres queridos habí­an viajado a Estados Unidos en fechas anteriores a la matanza de los 72 migrantes en Tamaulipas y desconocen su paradero.

Mientras que Jesús Pineda, familiar de cinco de los ocho cuerpos recibidos hoy, dijo que todaví­a esperan otros dos cuerpos, entre los que estarí­an una sobrina y un amigo de la familia, porque aseguró que antes de partir al paí­s del norte fueron nueve los guatemaltecos, entre familiares y amigos que partieron, y sólo han recibido siete, por lo que la cantidad de connacionales podrí­a incrementar.

Las investigaciones en México atribuyen la masacre al grupo Los Zetas, que llamaron a los familiares para exigir pago de rescate por los migrantes secuestrados, que no se pudo pagar. Sin embargo, los familiares entrevistados esta mañana declararon que no recibieron ninguna llamada y solamente se habí­an comunicado con sus seres queridos una vez durante el viaje, por la carencia de recursos.

También, durante la ceremonia de recepción de los cadáveres, el vicemandatario entregó una medalla póstuma a los familiares dirigida a cada uno de los cuerpos repatriados.