Renzi defiende su paquete de reformas ante Merkel


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El primer ministro de Italia, Matteo Renzi, defendió ayer ante la canciller alemana, Angela Merkel, su paquete de reformas para sacar al país de la recesión más prolongada que vivió desde las Segunda Guerra Mundial: «Lo hacemos porque es lo correcto para nosotros».

Berlín, Agencia dpa

«Italia debe aplicar estas reformas, naturalmente de manera conjunta con nuestros socios europeos. Pero Italia debe tener claro que no hacemos estas reformas porque Bruselas o Berlín o cualquier otro país nos lo pida. Lo hacemos porque es lo correcto para nosotros», afirmó Renzi, tras su reunión con la mandataria alemana en la Cancillería de Berlín.

 Renzi, el quinto mandatario italiano que Merkel conoce desde que asumiera el cargo en 2005, acudió a la capital alemana para participar en la trigésima cumbre bilateral de este tipo desde 1977.

 Su visita llega después de que la pasada semana presentara un paquete de reformas que incluye, entre otras cosas, una rebaja en el impuesto sobre la renta de 10 mil  millones de euros (13 mil 900 millones de dólares) para 10 millones de trabajadores con ingresos bajos y medios a partir del 1 de mayo.

 El antiguo alcalde de Florencia, de 39 años, expuso ante la canciller alemana, fiel defensora de la política de austeridad, sus planes para sacar adelante el país.

«Merkel no debe conocer cómo lo vamos a financiar en detalle. No le hemos enseñado un power point», respondió cuando le preguntaron sobre si había informado a Merkel sobre cómo piensa financiar estas medidas y sobre su controvertida intención de elevar el déficit del 2.6 por ciento actual al 2.8 por ciento.

«Para nosotros es importante dejar claro que respetamos todos los límites fijados en los tratados», aclaró. «No queremos sobrepasar los criterios de Maastricht, ni cambiar las reglas. Las reglas son muy importantes», agregó sobre el límite de no tener un déficit superior al tres por ciento del PIB.

En este punto, Renzi destacó la importancia de seguir trabajando para aumentar el crecimiento y aplicar las reformas de forma «inmediata».

Asimismo, rechazó el euroescepticismo que ha surgido entre los italianos. «Debemos transmitir a los italianos que Europa no es el problema, sino la solución», aseguró con la mirada puesta en las elecciones europeas de mayo.

 Por su parte, Merkel alabó los planes de Renzi y se mostró «impresionada» por el deseo de modificar las cosas en el país. «Tengo la impresión de que Italia cumplirá con el pacto europeo de estabilidad y crecimiento al llevar a cabo las reformas estructurales», aseguró y le deseó «mucha fuerza».

 «El vaso no está medio vacío sino medio lleno y el gobierno italiano trabaja para llenarlo», afirmó.

 El primer ministro de centroizquierda se encuentra en su primera gira por Europa desde que asumió el cargo el pasado mes. A diferencia de su predecesor, Enrico Letta, Berlín no fue su primera parada, sino París.