Un reconocimiento judicial solicitado por el Ministerio Público (MP) dentro del juicio que se desarrolla por la muerte de Mario Pivaral, ex parlamentario de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), se realizó esta mañana en la sede de ese partido; el acompañante del fallecido narró los momentos previos al crimen contra el congresista.
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A las ocho de la mañana, las partes se trasladaron hacia el lugar de los hechos para observar la referida diligencia. Luis Isem, acompañante de Pivaral, antes y durante el crimen, describió los hechos según la solicitud que le efectuó el MP, indicando que el ahora fallecido estaba «presuroso y preocupado».
En la anterior pesquisa se verificó el momento en el que el entonces parlamentario llega al lugar (sede de la UNE) en su vehículo, ingresa y sale de esas oficinas en varias oportunidades y en períodos muy cortos de tiempo; hasta que es asesinado en las afueras del inmueble, según explicó Isem.
El anterior testigo había testificado ente el tribunal Primero de Sentencia que él estaba de espaldas cuando le dispararon al legislador, así que corrió y se refugió en una clínica.
Luis Cruz Cho Tut es el único acusado de dicho crimen; según el MP existe una foto robot y el video captado por la cámara de un banco vecino al lugar que lo vincula de forma directa con ese hecho.
Defensa
Carlos Antonio Pop, abogado de Cho Tut reiteró que aun con la declaración de Isem dentro de la diligencia de reconocimiento judicial no existe ninguna posición coincidente entre su defendido y el fallecido diputado del partido oficial.
Según Pop la declaración del citado testigo es explícita en cuanto a las llamadas que Pivaral recibió minutos antes de ser asesinado frente a la sede de la UNE y que «la comparencia de todos los testigos del MP son coincidentes en cuanto a la inocencia de Cho Tut en el crimen».
Se intentó obtener declaraciones de la fiscal a cargo del caso pero no fue posible establecer comunicación telefónica.
Archivo
Mario Pivaral fungía como representante de Alta Verapaz en el Organismo Legislativo y el día de su asesinato sostendría una sesión con varios dirigentes, entre ellos de Cobán, de donde el sindicado de su muerte provenía.
Fue además subjefe de este bloque en 2005 y trabajaba en la Comisión de Gobernación y sus últimas semanas de trabajo las dedicó a la discusión y aprobación de la ley contra el crimen organizado.
Pivaral fue asesinado el 6 de abril de 2006 frente a la sede de la UNE cuando salía a responder una de las muchas llamadas telefónicas que recibió previo a su asesinato.