La Comisión Europea admitió ayer que la cooperación europea «todavía no funciona», tras el rechazo de Malta a tomar a su cargo a inmigrantes ilegales que naufragaron frente a sus costas y fueron rescatados por un pesquero español.
«Siempre hay una obligación de salvar la vida humana», recordó Friso Roscam Abbing, portavoz del comisario europeo de Justicia, Franco Frattini, que no quiso criticar sin embargo el comportamiento de Malta.
La toma a cargo de inmigrantes cuando se trata de naufragios en aguas internacionales «no es una situación ni política ni jurídicamente fácil», afirmó el vocero.
La Comisión lanzó un «estudio sobre el análisis de las leyes marítimas aplicables» en estos casos, indicó Roscam Abbing, sin poder procesar cuándo serían publicados sus resultados.
Más de 25 inmigrantes clandestinos, aparentemente marfileños, rescatados frente a Malta por un pesquero español se dirigían a España, informó el martes el ministerio de Asuntos Exteriores español.
El pesquero español «Montfalcó» los rescató el sábado cuando se habían refugiado sobre la parte flotante de una jaula para atunes.
Malta rechazó recogerlos porque fueron rescatados «fuera de la zona de búsqueda y socorro» del pequeño Estado.
Las peripecias de estos inmigrantes recuerdan las vividas en julio pasado por 51 inmigrantes recogidos por otro pesquero español frente a Libia.
Obligados a quedarse a bordo del buque durante más de una semana debido a diferendos entre las autoridades maltesas, que se negaban a acogerlos, y varios otros países mediterráneos, fueron finalmente repartidos «temporalmente» entre Malta, Italia, España y el principado de Andorra.