Las bolsas asiáticas registraron severas caídas hoy y las europeas, que habían sufrido una hecatombe ayer, abrieron con nuevas pérdidas, impactadas por la noticia de que Estados Unidos estaba en recesión y otras poco alentadoras noticias de la economía mundial.
En las primeras operaciones en Europa, Londres perdía 1,43%, París 1,41%, Fráncfort 1,60% y Madrid 0,98%.
En la región Asia Pacífico, el anuncio de un recorte de un punto porcentual de la tasa básica de interés en Australia (a 4,25%) y de nuevas medidas para facilitar el crédito en Japón no bastaron para impedir pérdidas colosales.
La caída fue general: -6,35% en Tokio, -5% en Hong Kong, -3,3% en Seúl y -4,2% en Sídney.
«Pensamos que la recuperación de la semana pasada fue demasiado fuerte y que los mercados rectifican el tiro», afirmó Dariusz Kowalczyk, estratega jefe de CFC Seymour en Hong Kong.
Ayer, las plazas europeas habían sufrido una hecatombe, con caídas de 5,19% en Londres, 5,60% en París, 5,88% en Fráncfort, 6,25% en Milán 6,25% y 4,49% en Madrid.
La Bolsa de Nueva York también cayó fuertemente ayer, poniendo fin a una serie de cinco sesiones consecutivas al alza: el Dow Jones perdió 7,70% (la cuarta mayor de la historia del índice estrella de la primera Bolsa mundial) y el Nasdaq 8,95%.
El índice ampliado Standard & Poor»s 500 cedió por su parte 8,93%.
«Los datos económicos parecen apuntar hacia una economía que va de mal en peor. La inquietud general es que la recesión sea más severa» que lo esperado, dijo Owen Fitzpatrick, del Deutsche Bank.
«Va a ser difícil tener recuperaciones duraderas, en vista de las caídas registradas en los indicadores económicos», añadió el analista del Deutsche Bank.
«Las preguntas que quedan por resolver son hasta qué punto y durante cuánto tiempo va a afectar la recesión», estimó Michael Fowlkes, analista del operador en internet Investors Observer.
En el mercado de divisas, dólar y euro sufrían caídas de consideración ante el yen, convertido en un valor refugio. El billete verde volvió a estar un momento a menos de 93 yenes y la moneda única europea a menos de 118 yenes hoy en la mañana en Asia, antes de recuperarse unas horas más tarde. El euro se movía a 1,2612 dólares hoy en la mañana en Asia, contra 1,2607 dólares al cierre de ayer.
Los inversores esperan las decisiones, el jueves, del Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de Inglaterra (BoE).
El Banco de Japón (BoJ) anunció hoy nuevas medidas para ayudar a las empresas con dificultades a pedir créditos bancarios, en un intento de frenar la recesión en la que entró la segunda economía mundial.
El BoJ decidió, sin embargo, mantener los tipos de interés en el 0,30%.
Los precios del petróleo seguían bajando por la mañana. El barril de Brent del mar del Norte para entrega en enero se ubicó en 46,03 dólares, su más bajo nivel desde el 18 de febrero de 2005, perdiendo 1,94 dólares desde el cierre de ayer, cuando ya había perdido 5,52 dólares.
El barril del West Texas Intermediate (WTI), que se vende en el mercado electrónico en Nueva York, perdió hasta 1,92 dólares a 47,36 dólares, su nivel más bajo desde el 20 de mayo de 2005, luego de haber registrado ayer una caída de 5,15 dólares.
Ahora es oficial: la economía de Estados Unidos está en recesión desde diciembre de 2007, anunció ayer un panel de economistas encargado oficialmente de estudiar los ciclos económicos.
El Comité de Investigación del Ciclo Económico de la Oficina Nacional de Investigación Económica (NBER) dijo que llegó a esa conclusión, durante una teleconferencia realizada el viernes.
Pese a que una recesión es generalmente definida como dos trimestres consecutivos de descenso de la actividad económica, el panel tiene sus propios criterios para determinarla.
«Una recesión es un descenso significativo de la actividad económica que se extiende a través de sus sectores, que dura más de unos pocos meses, normalmente visible en producción, empleo, ingreso real y otros indicadores», señala el comité.
«La recesión comienza cuando la economía alcanza un pico de actividad y termina cuando la economía toca su piso. Entre piso y pico, la economía está en expansión», agrega.
El comité subraya que «identificó diciembre de 2007 como el mes en el que la economía alcanzó la cima, luego de determinar que el subsecuente declive de la actividad económica fue lo suficientemente amplio como para calificar como una recesión».
La última fase de expansión económica duró, por tanto, seis años y un mes. «La precedente expansión en los años noventa había durado 120 meses (diez años exactos), añadió el organismo.
Las dos recesiones precedentes habían durado ocho meses: desde julio de 1990 hasta marzo de 1991, y desde marzo a noviembre de 2001.
La más prolongada que se registró en el siglo XX fue la llamada Gran Depresión, que estalló tras el crack bursátil de 1929 y se extendió hasta marzo de 1933.
El comienzo de la recesión, en diciembre de 2007, fue precedido en seis meses por el desencadenamiento de lo que, según numerosos observadores, marca el inicio de la crisis de las hipotecas «subprime» (créditos hipotecarios de riesgo): la liquidación de dos fondos especulativos que operaban en ese tipo de papeles, en los cuales invertía el banco Bear Stearns.
Para resumir sus criterios, la NBER explica que «una recesión es una baja significativa de la actividad económica que se disemina a través de la economía durante varios meses, y normalmente es visible en la producción, el empleo, el ingreso real, y otros indicadroes».
La oficina afirma que se apoya sobre cuatro medidas mensuales de la actividad económica para diseñar un cuadro más completo que el producto interno bruto (PIB).
La mayor parte de los países definen la recesión como el encadenamiento de dos trimestres consecutivos de contracción del PIB.
El número de empleos en la economía estadounidense «alcanzó un pico en diciembre de 2007 y bajó todos los meses posteriores, explicó el NBER.
La medida del ingreso disponible de los hogares empleada por la NBER «tuvo un pico en diciembre de 2007, y siguió una evolución en zigzag a partir de entonces hasta junio de 2008 a niveles ligeramente inferiores al pico, y cayó de manera general desde junio».
Las ventas en volumen de bienes y servicios, incluidos los bienes importados, alcanzaron «un pico bien definido en junio de 2008″. Finalmente, la producción industrial tuvo su pico en enero de 2008».
Por todas estas razones, la NBER considera que incluso si el primer trimestre de 2008 fue de crecimiento del PIB ( 1,0% en ritmo anual con relación al precedente), se trataba de un trimestre recesivo, al igual que el segundo, que sorprendió con un alza robusta de 2,8% del PIB.
El presidente de la Reserva Federal (Fed) estadounidense Ben Bernanke reconoció ayer que la «posibilidad de utilizar una política clásica de intervención sobre las tasas para sostener la economía es evidentemente limitado actualmente».
Sin embargo, el banco central dispone «de numerosos medios» de intervención aumentando la liquidez disponible, agregó Bernanke, en un discurso pronunciado en Austin (Texas, centro-sur de EEUU).
Bernanke estimó además que la inflación en Estados Unidos volverá en 2009 a un nivel aceptable para la Fed, en momentos en que algunas voces advierten del riesgo de deflación.
«La inflación global debería bajar fuertemente durante el año próximo, hasta niveles conformes con la estabilidad de precios», afirmó.