Los rebeldes capturaron hoy una base aérea militar en el norte de Siria, su segunda victoria estratégica importante en igual número de días, dijeron activistas.
El asalto contra el aeródromo de al-Jarrah en la provincia de Alepo tuvo lugar un día después de que combatientes de la oposición se apoderaron de la presa más grande del país, un emblemático símbolo industrial del régimen de cuatro décadas de la familia del presidente Bashar Assad.
Los rebeldes han logrado sus mayores triunfos en la guerra civil en el noreste de Siria y ambas victorias parecían indicar que consolidan su control en grandes franjas que antes estuvieron muy disputadas en el norte del país.
Rami Abdul-Rahman, el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, dijo que tras días de choques esporádicos en torno al aeródromo de al-Jarrad, los rebeldes lanzaron el lunes un asalto importante contra la base y para el martes en la mañana controlaban las instalaciones.
Dijo que varios efectivos del régimen fueron muertos o heridos en la lucha en la zona mientras que otros huyeron ante el avance insurgente. No se difundió la cifra de bajas de la oposición.
La base aérea, ubicada cerca de la presa al-Furat capturada el lunes, albergaba aviones de combate que han efectuado ataques aéreos contra zonas en control de los rebeldes a lo ancho del país.
En un video que difundieron los activistas en internet, se observan diversas aeronaves militares en al-Jarra, algunas de ellas estacionadas en la pista mientras que otra se encontraba en un hangar, donde había cajas de municiones apiladas en un muro.
«Estos aviones de combate están ahora en manos del movimiento islámico Ahrar al-Sham», dijo un rebelde en el video en referencia en referencia a una unidad insurgente específica.
El video parecía genuino y era congruente con información de The Associated Press sobre los acontecimientos descritos.
La base aérea se ubica cerca de la localidad nororiental antes conocida como Tabqa. El nombre del lugar fue cambiado a Thawra, que en árabe significa revolución, tras la construcción en el lugar de la presa al-Furat a finales de la década de 1960.