El gobierno español rebajó hoy las declaraciones de un líder encarcelado de ETA, quien aseguró que el movimiento separatista vasco está preparado para renunciar a la violencia y buscar la independencia del País Vasco de forma pacífica y a través de la política.
El vicepresidente y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, dijo que quiere ver hechos y no palabras, en respuesta a unas declaraciones de Arnaldo Otegi, ex líder de Batasuna, una formación proscrita por sus vínculos con ETA.
Otegi, actualmente en prisión, afirmó en una entrevista a The Wall Street Journal que ETA está dispuesta a dar garantías de sus intenciones, dejando entrever que podría aceptar que algún organismo internacional supervise el proceso y un teórico desarme de la organización.
«Lo que sucede es que son décadas de hechos tremendos, asesinatos, por poner un ejemplo, que no se cierran con dos o tres declaraciones», respondió Rubalcaba. «Lo que estamos esperando es que ETA declare el fin y, mientras tanto, (sobre) este juego de declaraciones, yo creo que merecen un silencio prudente».
ETA declaró una tregua unilateral el pasado septiembre y Rubalcaba reconoció que está extendida la expectativa de que el grupo vasco podría emitir un nuevo comunicado en los próximos días.
Sin embargo, el ministro del Interior explicó que toda esta especulación tiene un cierto elemento de propaganda y que, en su caso, prefiere esperar para ver lo que ETA dice o hace.
ETA, considerada una organización terrorista por la Unión Europa y Estados Unidos, ha asesinado a más de 825 personas en su campaña por un País Vasco independiente de España.