Normalista en tiempos idos, gracias a la reapertura de las Normales que hizo el gobernante doctor Juan José Arévalo, en la época democrática. Entre los primeros alumnos becados, en condiciones modestas, suplidas por el entusiasmo e interés estudiantil. Acaeció en San Marcos, Jalapa y Cobán, cerradas de una sola plumada por el tirano general Jorge Ubico.
El pensamiento humanista de Arévalo Bermejo, diseñó una regionalización educativa funcional, tal como se comprobó desde el principio. Gané la ansiada beca en el Instituto Normal Mixto del Norte, Cobán Alta Verapaz, otro tanto se llevó a cabo con estudiantes de Baja Verapaz, Petén e Izabal. El plan de estudios fue de cinco años. Nuestra promoción: 1946-1950.
Enorme beneplácito representó para el colectivo social esta medida de buen gobierno central, por lo tanto las palmas efusivas como las palpitaciones del corazón emocionado de los beneficiarios abrió materialmente las puertas de par en par al jolgorio histórico y memorable, dando la cordial bienvenida a los novonormalistas, ávidos en demasía por el pan del saber.
Condición motivada y bien adjetivada en la escala de valores humanos, fue también objeto de empeño, base sólida comprobable, consistente en la coeducación. Más que simple aceptación en planes y reforma en los pensa de estudios, constituyó derroteros novedosos, a la postre la consolidación en la formación de normalistas dispuestos a quedar al influjo de Martí.
Dejo constancia de las vivencias que hubimos de superar con alegría notoria. Significaba la ocasión propicia de incorporarnos en las plazas, con nombramiento formal del Ministerio de Educación. Inicio del ciclo en la segunda quincena de mayo; asueto los días comprendidos en Navidad y Año Nuevo. Al retorno de labores las evaluaciones finales en el propio febrero.
Las esperadas vacaciones tuvieron venturosa realidad en marzo y abril, durante la época seca: Ahora resulta fácil advertirlo mediante el cambio climático, muy llevado y traído en todas partes, causante de repitentes fenómenos naturales, merecedores de asombro por los daños ocasionados. Sin embargo la población suele decir en seguidilla: al mal tiempo, buena cara.
Experiencias adicionales también logramos superar a base de entusiasmo inmenso, puesto que el ideal de ser educadores lo mantuvimos. El presidente Arévalo modificó el ciclo escolar, hubo las inevitables variantes. Con miras a que el mismo se iniciara en enero y concluyera en octubre del mismo año calendario. Tal y como suceda desde largos años ¿verdad?
Parte del pensa estudiantil, en lo normal recibimos la asignatura de Educación y Prácticas Cívicas. Por cierto se instaló el autogobierno un tiempo. Mediante elecciones con todos los mecanismos de rigor, resultamos electos delegados mi primo Juan Vicente Narciso Najarro y quien escribe. Pero debido a no interrumpir las prácticas docentes, asistieron al evento nacional sobre educación, los suplentes.
Recuerdos a los fallecidos y un apretón de manos y abrazos fraternos a los vivitos y coleando.