El tenista español Rafael Nadal, número uno del mundo, vivió hoy una noche soñada en el «mítico» estadio Marcaná, donde en medio a la ovación de la «torcida» dio el puntapié inicial, de zurda, del clásico entre Vasco da Gama y Flamengo, válido por la octava fecha del Campeonato Carioca.

Como si fuera poco, recibió una camiseta del «Mengao», que se impuso por 2-1, con su nombre estampado debajo del número 10, del equipo con mayor hinchada de Brasil, de manos del presidente del club, Eduardo Bandeira de Mello».

«Es espectacular. Es la primera vez que tengo la oportunidad de estar en un estadio tan mítico como el Maracaná, y la verdad es que es una sensación muy bonita, una experiencia muy especial», dijo un animado Nadal, fanático confeso del fútbol.

Además de la presencia del mejor tenista del mundo en el clásico disputado en el remozado Maracaná, que recibirá la final del Mundial de fútbol que comienza en junio próximo, otro aspecto que sumó emoción a la noche carioca fue la presentación de una pancarta portada por los jugadores, alusiva a los insultos racistas que sufrió el futbolista Tinga, del Cruzeiro, en Perú el miércoles pasado, durante un choque ante el Real Garcilaso, válido por la Copa Libertadores de América.

Nadal debuta el próximo martes en la primera edición del Abierto de tenis de Río de Janeiro ante su compatriota Daniel Gimeno Traver, número 84 del mundo, a quien el ocho veces campeón de Roland Garros se impuso en las únicas dos ocasiones en que se midieron.

Esta es la tercera visita a Brasil del tenista de 27 años.