Quieren suprimir logos de paquetes de cigarrillos


Australia señaló el jueves que quiere ser el primer paí­s en prohibir los logos y reducir a letras mí­nimas el nombre de las marcas en las cajetillas de cigarrillos, en una iniciativa que provocó una respuesta furiosa de la industria tabacalera.


Los cigarrillos se venderí­an a partir de 2012 en paquetes estándares que llevarán grandes advertencias gráficas contra el hábito de fumar y las marcas aparecerán en letra pequeña, según un proyecto de ley propuesto por el gobierno.

Los impuestos al tabaco también aumentarán en un 25% a partir de la medianoche el jueves. De esta manera, el precio por un paquete de cigarrillos se incrementará en unos 1,85 dólares. Todos los fondos recaudados por esta ví­a serán destinados al sector de la salud.

«Será el paí­s más estricto del mundo en cuanto a las reglas para los envoltorios», señaló el primer ministro, Kevin Rudd.

Rudd también indicó que el gobierno propondrá nuevas restricciones a la publicidad de cigarrillos en internet y que invertirá 27,8 millones de dólares en «intensas» campañas contra el cigarrillo.

«Las grandes tabacaleras odiarán lo que estamos haciendo», dijo el primer ministro. «Sin embargo, el gobierno no se va a disculpar por lo que está haciendo. Es la decisión correcta», añadió.

Imperial Tobacco Australia ya anunció que buscará bloquear la medida, argumentando que los paquetes estandarizados perjudicarán sus ganancias y que la marca posee un valor comercial.

«Introducir paquetes sencillos le impide al consumidor identificar nuestra marca de otras, y eso tiene valor para nosotros», indicó una portavoz de la empresa a la cadena de radio ABC.

«Realmente afecta el valor de nuestro negocio como empresa comercial y lucharemos para que se protejan nuestros derechos internacionales de propiedad», añadió.

Un experto en propiedad intelectual indicó que las medidas podrí­an costarle a los contribuyentes más de mil millones de dólares en indemnizaciones. Sin embargo, la ministra de Salud, Nicola Roxon, señaló que la legislación serí­a elaborada con cuidado para evitar acciones legales.

«Habrá advertencias muy gráficas y no habrá logos ni marcas coloridas», explicó Roxon. «Este es el último vestigio de publicidad que le queda a las tabacaleras en Australia y no pediremos disculpas por intentar ponerle fin».

La publicidad de cigarrillos está prohibida en Australia y fumar está prohibido en la mayorí­a de espacios cerrados como restaurantes y oficinas.

Aun así­, unos 15.000 australianos mueren cada año a causa de enfermedades relacionadas al cigarrillo, según Rudd. El consumo de tabaco le estarí­a costando al paí­s unos 31.500 millones de dólares cada año en salud y en pérdida de productividad, añadió.

Las organizaciones del sector de la salud se mostraron satisfechas por la iniciativa, señalando que ayudarí­a a reducir el número de niños que experimentan con cigarrillos.

«Las investigaciones confirman que la exposición de los paquetes de cigarrillos en público predispone a los niños a fumar y los hacen más propensos a experimentar con el tabaco», afirmó Cameron Prout, de la Heart Foundation (Fundación del Corazón).

«Prohibir los logotipos es una excelente iniciativa de salud pública que no solamente salvará vidas, sino que también reducirá la carga sobre el sistema de salud, ya que habrá menos personas con enfermedades cardiovasculares y cáncer», añadió el médico.

La vecina Nueva Zelanda también incrementó el precio de cigarrillos en un 10% el jueves, con alzas similares proyectadas para comienzos de 2011 y 2012.

«Estas medidas subirán el precio de los cigarrillos y del tabaco de enrollar lo suficiente como para salvar cientos de vidas», indicó la viceministra de Salud, Tariana Turia.

Turia es precisamente una de las lí­deres del Partido Maorí­, que representa a los nativos de Nueva Zelanda. Aproximadamente el 40% de los adultos maorí­es fuma, lo que representa el doble del promedio nacional.