¿Qué pasará con las remesas? 1ª. Parte


Aquí­ en Guatemala tenemos la costumbre de que, a pesar de que «la estamos viendo venir», nada nos preocupa, no le damos ninguna importancia a las señales y cual cultura del avestruz, optamos por voltear nuestra mirada a otro lado en lugar de prepararnos a enfrentar cualquier amenaza y esperamos hasta el último momento para empezar a buscar soluciones.

Guillermo Wilhelm

Hace unos dí­as, minutos después de un panel que se dio en el Musac sobre el tema de los migrantes, en una conversación uno de mis interlocutores me sermoneaba que contrario a lo que he escrito sobre el futuro de las remesas, éstas apuntan a elevarse cada año, las cuales cual cohete pirotécnico continúan su imparable ascenso hacia el infinito y todo indica que, a pesar de las deportaciones, éstas no tienden a la baja. Por supuesto, si no analizamos el panorama completo inevitablemente caeremos en el análisis simplista y éste por supuesto nos llevará a conclusiones erróneas. Este camarada argumentaba que a causa de los dos factores principales que todos conocemos obligan a la emigración, la violencia y la pobreza, las personas siempre buscarán mejores horizontes en otras tierras. Totalmente de acuerdo, pero esta observación no debemos formularla de manera tan parca y limitada, es necesario analizar todos los factores que integran cada caso. En la experiencia nuestra, que es parte de la experiencia migratoria hispanoamericana de los últimos años, es cierto que en su gran mayorí­a los pueblos han emigrado por falta de oportunidades, y en menores grupos, los que buscan ámbitos más seguros. Pero esto es solamente una cara de la moneda, ya que no debemos olvidar que separadamente del «push effect», están las sociedades y paí­ses receptores que también se manifiestan y son parte de este fenómeno social que constituyen las migraciones.

Hoy, el principal paí­s receptor de emigrantes manifiesta claramente su rechazo a continuar recibiendo indocumentados como lo ha estado haciendo desde hace mas de un decenio. No más «ilegales» han dicho su sociedad (especialmente la mayoritaria) y sus autoridades. Y esta es la variable, ya lo dijo Isaac Newton antes de descubrir la ley de la gravedad, «todo lo que sube tiene que bajar», y es donde cabe analizar los factores que nos obliga a visualizar el futuro de este fenómeno social y económico que constituyen las migraciones y su efecto más evidente, las remesas familiares. Continuará