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El Festival, que se extenderá hasta el sábado 23 de noviembre, tendrá este año en la competencia latinoamericana a 15 películas de siete países que lucharán por el Paoa de Oro. La lista incluye «La jaula de oro», del español Diego Quemada-Diez, ganadora de «Una cierta mirada» en el festival de Cannes, y a la triunfadora de San Sebastián, la venezolana «Pelo malo».

Competirán también «Paisajes devorados» del destacado director argentino Eliseo Subiela, y «Flores raras» del también reconocido cineasta brasileño Bruno Barreto.

Las chilenas «El verano de los peces voladores» de Marcela Said y «La pasión de Michelangelo» de Esteban Larraín, que ya se proyectaron en Cannes y Roma, respectivamente, estarán en competencia.

Son muchas las películas que se filman en Latinoamérica, declaró el director artístico del festival, Edgar Doll, al cibersitio del periódico El Mercurio. «Es una cantidad enorme, pero las exhibiciones son escasas. Viña juega un rol gravitante en este punto», agregó.

El festival incluirá la exhibición de filmes que se proyectaron a lo largo de su historia, como «Valparaíso mi amor», que el director chileno Aldo Francia estrenó en 1969, o el documental de 1968 «La hora de los hornos», de los argentinos Fernando «Pino» Solanas y Octavio Getino.

Doll indicó que los curadores de esta sección buscaron «películas que reflejan la significación histórica y patrimonial» del festival, puesto que son cintas que muestran distintas realidades de la cultura latinoamericana, eje fundamental del encuentro.

Durante los días del festival también se repasarán obras del nuevo cine argentino, y retrospectivas del actor trasandino Gastón Pauls, así como de los directores Gustavo Fontán, Pino Solanas y Tetsuo Lumiere.

Para esta nueva edición se espera una convocatoria récord de 20 mil personas.