La proteína C reactiva (CRP), uno de los principales indicadores de inflamación en el organismo, no es responsable del desarrollo de enfermedades coronarias, según un estudio británico publicado el martes en Estados Unidos.
La CRP se eleva de forma importante y rápida en todo síndrome inflamatorio. También es considerada un biomarcador del riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular cuya progresión se acompaña a menudo de inflamación.
Pero hasta ahora ningún estudio había mostrado que un nivel elevado de esta proteína contribuyera al desarrollo de esta patología, que consiste en una acumulación de placas en las arterias.
«Científicos pensaban que la CRP podría ser una buena molécula a la que apuntar para desarrollar un tratamiento, ya que un aumento de los niveles de esta proteína en la sangre indica un riesgo mayor de enfermedad en las arterias coronarias», explicó el doctor Paul Elliott, epidemiólogo del Imperial College London (GB), principal autor del trabajo divulgado en el Journal of the American Medical Association (JAMA) del 1 de julio.
«Pero nuestro estudio muestra que este vínculo no es causal y por lo tanto que los tratamientos que apunten al CRP no tendrían efecto para reducir el riesgo de arteriosclerosis», añadió.