Prometen ayuda millonaria para Afganistán


El presidente francés Nicolas Sarkozy (primera fila) estrecha la mano de su homólogo afgano Hamid Karzai durante la reunión sostenida este dí­a.

Un monto de más de 16 mil millones de dólares de ayuda internacional fue prometido a Afganistán el jueves en Parí­s, durante la conferencia de donantes para ese paí­s, según declaró a la prensa el embajador estadounidense en Kabul, William Wood.


«No todos los participantes se han manifestado aún, pero según mis cálculos, fueron prometidos más de 16 mil millones de dólares», dijo el embajador al margen de la conferencia internacional sobre la reconstrucción y el desarrollo de Afganistán.

«Lo que resulta de las conversaciones de hoy, es que la comunidad internacional se compromete a largo plazo en la continuación y el aumento de su ayuda», estimó.

Interrogado al respecto, un diplomático francés confirmó las cifras: «Pienso que se deberí­an superar los 15 mil millones», dijo.

Estados Unidos prometió la ayuda más importantes con 10 mil 200 millones en dos años.

Más de 80 delegaciones -68 paises y 17 instituciones internacional – participan en la conferencia, durante la cual el presidente afgano Hamid Karzai presentó un ambicioso plan de desarrollo de 50 mil 100 millones de dólares en cinco años.

Antes de la conferencia, un alto responsable estadounidense habí­a evocado el deseo que la comunidad internacional se comprometa en Parí­s con por lo menos 15.000 millones de dólares para ese plan.

VíDEO


La coalición dirigida por Estados Unidos se defendió contra las acusaciones de que habí­a matado a 11 soldados paquistaní­es difundiendo el jueves un ví­deo de cuatro ataques aéreos «de precisión» contra «elementos antiafganos» en Pakistán.

Respecto a los ataques, ocurridos en la noche del martes al miércoles, el departamento estadounidense de Estado sólo comentó por el momento que lamenta «la pérdida de vidas paquistaní­es».

En las imágenes difundidas el jueves por la coalición y rodadas por un drone (un avión sin piloto) se ve claramente cuatro obuses o misiles, que una voz fuera de campo describe como «municiones de precisión teledirigidas» caer sobre un grupo de siete hombres, calificados de «elementos antiafganos».

Según la versión paquistaní­, que hizo públicos el miércoles los funerales de los soldados, todo comenzó con una incursión del ejército afgano en territorio paquistaní­ el martes por la noche, en el distrito de Mohmand, en las zonas tribales del noroeste, donde EEUU y Afganistán aseguran que los talibanes y Al Qaida constituyeron sus retaguardias.

Las tropas paramilitares paquistaní­es lanzaron el combate, rechazando a los soldados afganos, según Islamabad. Pero los talibanes paquistaní­es y otros combatientes islamistas se enfrentaron también a las tropas afganas, según el ejército paquistaní­ y la coalición internacional.

La coalición reconoció desde el miércoles que habí­a replicado, pero «por legí­tima defensa», según sus oficiales y Estados Unidos y aseguró, de acuerdo con el departamento de Estado, que ningún militar cruzó la frontera.

Once soldados paquistaní­es y 15 combatientes islamistas murieron, según Pakistán. Los talibanes paquistaní­es reconocieron por su lado que perdieron a ocho hombres en los ataques de la coalición.

En el video de la coalición, una voz asegura que una patrulla de las «fuerzas de la coalición» fue atacada en la provincia afgana de Kunar por siete combatientes que llevaban armas livianas y lanzacohetes, y luego se replegaron a Pakistán.

«Une bomba de precisión mató a dos elementos anti-afganos en Pakistán. Es claro que no hay ningún edificio o puesto militar en la zona. El resto de los elementos anti-afganos trata de huir y se esconde en una profunda barranca», según el comentario.

«Una segunda bomba de precisión explota y una tercera tiene como objetivo los elementos anti-afganos en la barranca. Los sobrevivientes son objeto de un nuevo ataque con bomba de precisión que mata a los últimos tres. Es claro que no hay ningún edificio en la zona», reiteró el comentario.

El Pentágono afirmó que los ataques fueron «legí­timos».

Según los expertos, este episodio, el más grave desde que Pakistán se alió con Estados Unidos en su «guerra contra el terrorismo» a fines de 2001, puede complicar más las relaciones entre Washington y el nuevo gobierno paquistaní­ surgido de las legislativas de febrero, que trata de negociar un acuerdo de paz con los talibanes paquistaní­es cercanos a Al-Qaida, que prometieron por su lado continuar la «yihad» en Afganistán contra las fuerzas de la coalición.

Estados Unidos reprocha a Pakistán, hasta ahora uno de los «aliados clave» en su «guerra contra el terrorismo», de no hacer suficientes esfuerzos para impedir las incursiones de combatientes fundamentalistas en Afganistán.

Asimismo reiteran de manera insistente que Al Qaida reconstruyó sus fuerzas en las zonas tribales paquistaní­es y desde ahí­, según ellos, la red de Osama Bin Laden prepara nuevos atentados en los paí­ses occidentales.