Las demandas de los grupos campesinos, que en maratónicas manifestaciones y marchas han solicitado acceso a tierras, créditos agrarios y la condonación de la deuda agraria, apenas han tenido eco en el Gobierno; los programas y proyectos en la cartera de Agricultura avanzan a paso lento y enmarcados en cuestionamientos sobre transparencia y eficiencia.

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Un informe de la Coordinadora de ONG y Cooperativas (Congcoop) advierte que la ejecución presupuestaria del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación al mes de julio había alcanzado únicamente el 21.23% de los fondos asignados -Q1,759,521,357-, lo cual evidencia grandes dificultades para que arranquen los programas a su cargo.
El análisis cobra especial relevancia cuando se contrasta con los urgentes y serios problemas expuestos por los campesinos a lo largo del año, especialmente en materia de productividad agrícola y seguridad alimentaria.
Congcoop indica que al programa de Seguridad Alimentaria y Nutricional, uno de los pilares fundamentales para apoyar a la ejecución del plan Hambre Cero, se le han recortado Q109.96 millones, impactando actividades de alta incidencia como la entrega de alimentos y la asistencia para la población vulnerable.
Dentro de dicho programa se encuentra el subprograma de la Harina Fortificada, también conocido como “Supertortilla”, que dentro de sus metas plantea incidir en 10 municipios de San Marcos, Huehuetenango, Quiché y Jalapa; el problema radica en que a la fecha ni siquiera se ha comprado la harina y el proceso de adquisición ya se canceló en una ocasión.
Por otro lado, el programa Cosecha Segura -para la asistencia productiva con fertilizantes- aún se encuentra en ejecución y de forma desfasada con los ciclos productivos campesinos. Esta iniciativa arrancó con una serie de cuestionamientos sobre la transparencia en la compra de los agroquímicos y sin llegar a todos los beneficiarios, pues en varias localidades se denunció la politización del proyecto y en otras se advirtió del robo del producto de las bodegas de almacenamiento.
Mientras tanto, el programa Triángulo de la Dignidad, que busca mejorar la producción de alimentos en las áreas rurales y elevar las condiciones de vida de las familias, apenas fue inaugurado la semana pasada en la aldea Telemán, Panzós, Alta Verapaz; se les entregará un crédito de Q3 mil a cada beneficiario, quien deberá producir granos básicos y otra clase de cultivos.
No obstante, no se cuenta con un seguro agrícola que respalde a los campesinos que pierdan sus cosechas con las lluvias invernales -lo cual sucede con frecuencia en la época- y muchos se quedaron fuera de los listados de beneficiarios por la falta de acceso a tierras para el cultivo.
Por último, el programa Bosques y Agua para la Concordia arrancó hace solo seis días y se perfila desde ya ser las más efectiva de las iniciativas de Agricultura; no obstante, el proyecto no está dirigida a todos los campesinos sino a los Expatrulleros de Autodefensa Civil (exPac).
HALLAZGOS DESTACADOS
Zully Morales, de Congcoop, considera que en más de siete meses de gestión, el MAGA no ha conseguido ejecutar con eficiencia y puntualidad los programas de los que depende la alimentación y la vida de millones de personas.
La experta dijo que la Cartera hizo un análisis para organizar la entrega de los fertilizantes con base en una clasificación regional de los índices de vulnerabilidad en seguridad alimentaria y nutricional, remarcando la pobreza y pobreza extrema. Sin embargo, al igual que en gobiernos anteriores, el programa se ejecutó con criterios político-electorales.
“De esa forma, el programa de fertilizantes no viene a fortalecer el desarrollo rural y el incremento de los alimentos. Todo lo contrario, es un programa que más allá de atender a la población afectada, apoyar a la seguridad alimentaria y a la economía familiar, más viene a fortalecer a los partidos políticos que ven dentro de este programa la forma de pagar sus cuotas de proceso de elección”, apuntó Morales.
En cuanto al subprograma de Harina Fortificada, Leocadio Juracán, del Comité Campesino del Altiplano, señala que rompería con las formas culturales de los pobladores, ya que las familias aprovechan los productos nativos para la producción de alimentos, de tal manera que anticipadamente estima que la iniciativa fracasará. Congcoop coincide en que el proyecto no tiene pertinencia cultural; la organización propone que en su lugar, se apoye con incentivos efectivos a los campesinos, como herramientas, acceso a tierras y capacitación para poder producir sus propios alimentos.
A criterio de Manuel Pérez, de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas, una de las principales preocupaciones es la falta de información de los proyectos, como ocurre con el programa del Triángulo de la Dignidad. “Se encuentran en papeles, en documentos, pero lo que ha sucedido es que no se les asigna el presupuesto correspondiente para hacerse efectivos”, manifiesta.
Según Pérez estos programas, como el de Bosques y Agua para la Concordia, nunca terminan de establecer procedimientos internos ni las condiciones o requisitos para ampliar la base de beneficiarios, y esa es la preocupación de los sectores campesinos.
TRANSPARENTAR PROCESOS
El ministro de Agricultura, Efraín Medina, plantea un panorama positivo y asegura que el Programa de Fertilizantes aún se encuentra en la fase de distribución y entrega, pues todavía existe un excedente; la instrucción que tiene el director ejecutivo es que a la brevedad se entregue el último saco de fertilizante.
Según Medina, el programa ha tenido muchas dificultades, porque se ha partido de cero y las licitaciones ordinarias a través del Ministerio debieron realizarse el año pasado, en los meses de agosto o septiembre, pero no se concretó el proceso en ese tiempo.
También indicó que trasparentar los procesos con las juntas fue un verdadero obstáculo para agilizar la entrega y distribución de los fertilizantes, lo cual generó conflictividad entre los diferentes grupos.
Medina defendió su gestión y si todo resulta como se planea, la ejecución presupuestaria avanzará de forma en los próximos meses para cumplir en buena medida con las metas estipuladas; manifestó que es necesaria una planificación iniciada este año para el 2013 con el afán de evitar los contratiempos y complicaciones en los proyectos.
Zully Morales
Congcoop
LOS PRINCIPALES PROGRAMAS EN EL AGRO
PROGRAMA COSECHA SEGURA (FERTILIZANTES)
El objeto es mejorar la seguridad alimentaria y reactivar la economía agrícola, a través de proveer fertilizantes a precios subsidiados a los pequeños agricultores; es decir, reduciendo sus costos de producción. El suministro de insumos agrícolas por el gobierno persigue hacer accesibles estos productos a campesinos de escasos recursos
En el MAGA se entiende por pequeño agricultor todos aquellos que practican una agricultura de subsistencia y cuentan con un área menor de 10 manzanas. Según estimados del MAGA, existen unos 800 mil pequeños agricultores en el país, los cuales constituyen la población objetivo de este programa.
Según datos del MAGA actualmente se benefician a 931 mil 899 con un total de 1 millón 863 mil 798 sacos de fertilizantes comprados y con una inversión de Q555 millones para la cobertura de 334 municipios de todo el país.
SUBPROGRAMA DE HARINA FORTIFICADA
El Plan Piloto “Dotación de Harina de Maíz Nixtamalizada, Enriquecida y Fortificada, se ejecutará en los departamentos de Huehuetenango, San Marcos, Quiché y ahora se adiciona el departamento de Jalapa, con los municipios de San Pedro Pinula y Jalapa cabera municipal, a partir de octubre del presente año y finalizará en marzo de 2013.
El proyecto contempla un presupuesto de Q.18.5 millones de quetzales y beneficiará a 8,771 familias integradas también por 17,542 niños menores de 5 años y mujeres en período de gestación o lactancia.
En Huehuetenango serán atendidos los municipios de: San Juan Atitán, Santiago Chimaltenango, San Miguel Acatán, San Mateo Ixtatán y San Rafael La Independencia; en San Marcos: Concepción Tutuapa y Comitancillo; en Quiché: el municipio de Nebaj; en Jalapa: San Pedro Pinula y Jalapa cabecera municipal.
TRIÁNGULO DE LA DIGNIDAD
Es prioridad en el marco de la Agenda del Cambio y el Pacto Hambre Cero, con el propósito de apoyar a productores y productoras de granos básicos (maíz, frijol y arroz), a través del otorgamiento de crédito, asistencia técnica y capacitación oportuna con el objetivo de asegurar el autoconsumo y la producción de excedentes para la comercialización e impulso a la seguridad alimentaria y nutricional, así como el desarrollo de la economía campesina.
A través del programa “Triángulo de la Dignidad”, que es ejecutado por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación -MAGA- y el Fondo de Tierras (Fontierra), se beneficiará a 67,515 pequeños productores agrícolas, hombres y mujeres, con créditos de Q3 mil cada uno para la producción de granos básicos y la compra de insumos (semilla y fertilizantes); los créditos están exentos de toda tasa de interés.
BOSQUES Y AGUA PARA LA CONCORDIA
Consiste en la reforestación de todo el territorio nacional a través de la Unidad Especial del programa Bosques y Agua para la Concordia para lo cual se dispone de un presupuesta de Q100 millones de quetzales el cual busca beneficiar a más de 98 mil 164 reforestadores, en su mayoría Expatrulleros de Autodefensa Civil.
De acuerdo a la proyección que se ha hecho en la Unidad Especial del Programa Bosques y Agua para la Concordia, en el primer mes serán atendidos 13 mil 500 personas que ya realizaron labores de mantenimiento y reforestación, según el caso.
Cada reforestador recibe un pago de Q5 mil 100 quetzales dividido en tres pagos (Q1 mil 700 cada uno) lo que representa erogar, en el presente año, un total de Q88 millones 400 mil quetzales para el pago de los 52 mil personas proyectadas. El resto para los Q100 millones de presupuesto se utilizarán para compra de arbolitos y funcionamiento.