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Otras mujeres en bosquejos sobre la misma pared en Palm Beach Modern Auctions tienen modelos igual de elegantes, pero la que hizo Lagerfeld brilla con luz propia— al igual que el acicalado diseñador y director creativo de Chanel.

«Hay actitud en ella», dijo Rico Baca, subastador y copropietario de la casa en West Palm Beach.

Baca espera que la actitud y la firma de Lagerfeld atraigan a compradores para el remate del 11 de enero de un archivo de bocetos de los diseños de Tiziani.

En la década de 1960, la casa romana Tiziani diseñó vestuarios para películas y ropa para Elizabeth Taylor y otras celebridades. También fue una de las casas de moda europeas donde Lagerfeld trabajó como colaborador al comienzo de su carrera.

Lagerfeld creó su reputación al hacer creaciones para Chloe, Fendi, Chanel y sus propias marcas. El diseñador alemán es reconocido en todo el mundo por su cola de caballo canosa, sus enormes lentes obscuros y sus conjuntos blanco y negro que incluyen cuellos altos. También ha experimentado con fotografía y dirección de cine además de publicar un libro de dietas único, tras perder más de 40 kilos (90 libras) para así poder usar ropa para modelos jóvenes y delgados.

Pero en Tiziani apenas era un diseñador de confección entre decenas de otros haciendo trabajos similares para casas más reconocidas.

Los detalles que Lagerfeld agregó a los bosquejos de Taylor y otros modelos— como pendientes, un tocado, un corte en una chaqueta o un tono específico de sombras en los ojos— demuestran la creatividad de un joven diseñador que iba dejando huella.

«Completaba todo el modelo», dijo Baca.

Los bosquejos son más que una ilustración de la visión que tienen los diseñadores de un modelo.

Son planes usados para comunicar información específica al equipo que produce cada conjunto, del diseñador a los creadores del estampado, los compradores de tela, los vendedores y otro personal. El archivo de Tiziani, que incluye más de 300 dibujos, subraya el cambio en la moda de la alta costura, usada sólo por mujeres ricas, a los diseños de confección que podían ser producidos en cantidades mayores con un costo más bajo.

El fundador de Tiziani, Evan Richards, guardó los diseños de Lagerfeld y sus libretas de bosquejos junto con otro trabajo producido en la casa en los años 1960, y el archivo fue conservado por los propietarios subsecuentes.

Los bosquejos podrían haberse perdido de haber quedado en las manos de Lagerfeld. En 2007, junto a un cesto de basura lleno de diseños descartados, Lagerfeld dijo al New Yorker, «¡Yo tiro todo!».

«¡El mueble más importante en una casa es el bote de basura! No me guardo ningún archivo, nada de borradores, nada de fotos, nada de ropa, ¡nada de nada! Se supone que debo hacerlo, ¡se supone que no debo recordar!», agregó.

Junto con objetos de Richards y Taylor, el trabajo de Lagerfeld es lo más destacado de la subasta.

«Estas son más bien piezas de arte. Creo que la gente no pone tanto esfuerzo en sus bosquejos en la actualidad», dijo Bill Hamilton, quien diseñó para Carolina Herrera por 17 años y ahora diseña para clientes privados.

Así como Lagerfeld ha mantenido vigente a Chanel actualizando elementos históricos de la casa francesa, como el charol, los tejidos de lana o sus famosas cadenas, el diseñador le dio su propio giro a las piezas impactantes que solía presentar Tiziani, dijo Hamilton.

«Sus bosquejos se ven mucho más jóvenes que lo que cualquier otro estaba diseñando en la época, mucho más libres», dijo Hamilton, quien ha estudiado el archivo de Tiziani.

Baca dijo que no podría estimar el valor del archivo como todo, pero las ofertas por los bosquejos comenzarán en 500 dólares por cada uno.

«No estaba pensado como arte, pero a 50 años se han convertido en arte pues fueron hechos por Lagerfeld», dijo Baca.