En el juzgado Segundo de Primera Instancia Penal presentó su primera declaración Mario Amancio Brol Samayoa, propietario de la empresa Alka Wenker, a la que la Superintendencia de Administración Tributaria señala de defraudar al fisco por unos Q718 millones.
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Brol es acusado del delito de resistencia a la acción fiscalizadora, sin embargo, el Ministerio Público considera que la evasión fiscal de esa entidad tuvo lugar con la compra de unos 114 millones de galones de combustible y es considerado uno de los más grandes fraudes en el país hasta la fecha.
Los hechos ocurrieron entre el 1 de enero de 2003 y el 31 de julio de 2004, cuando la empresa Alka Wenker, propiedad de Brol, importó combustible que reexportaría a países vecinos, exonerado de pagar tributos, pero éstos eran distribuidos en Guatemala por medio de la red de gasolineras Quetzal.