Primer Ministro chino defiende la polí­tica de Pekí­n en Tí­bet


El primer ministro chino Wen Jiabao (C) ofreciendo una conferencia de prensa al final de la sesión anual parlamentaria.  FOTO L A HORA:  AFP Peter PARKS

El primer ministro chino, Wen Jiabao, aseguró hoy que Tí­bet prospera bajo el régimen comunista chino, en respuesta al Dalai Lama, que esta semana afirmó que Pekí­n está convirtiendo su tierra en un «infierno».


Una presentadora de la televisión china hace su transmisión de noticias en la plaza de Tiananmen. El tema central ha sido la crisis económica y el plan de estimulación de China. FOTO LA HORA: AFP  Frederic J. BROWN

Wen también dejó claro que China mantendrá su posición de firmeza ante el lí­der espiritual del budismo tibetano, afirmando que la eventual organización de próximos contactos dependerá de que el Dalai Lama abandone su reivindicación de independencia para Tí­bet.

«Con respecto al Dalai Lama, nuestra posición es consistente y clara, basta con que renuncie a sus actividades separatistas y estaremos listos para proseguir el diálogo con sus representantes, nuestra puerta está abierta de par en par», dijo el Primer Ministro en conferencia de prensa al término de la sesión parlamentaria anual en Pekí­n.

Sin embargo, el Dalai Lama, de 73 años, que lleva 50 años exilado en India, afirma desde hace varios años que ha renunciado a la independencia y propone una «ví­a intermedia» que pasarí­a por una simple «autonomí­a cultural».

Después de los disturbios del año pasado en Lhasa, se reanudó el diálogo con los emisarios del Dalai Lama, pero sin dar resultados.

«La situación en conjunto en Tí­bet es estable y tranquila, los tibetanos desean vivir y trabajar en paz», dijo Wen a la prensa, negando un fracaso de la polí­tica china en el Tí­bet.

«Es justamente lo contrario, la estabilidad y los continuos progresos de Tí­bet demuestran el acierto de nuestras polí­ticas», afirmó después de destacar que Pekí­n ha hecho importantes inversiones en la región.

Además, afirmó, la Constitución y las leyes «protegen la libertad y los derechos de los tibetanos, en particular la libertad de culto».

Para evitar protestas el martes en el 50º aniversario de la reprimida rebelión de 1959 contra la presencia china, y en el primer aniversario de los disturbios de marzo de 2008 (21 muertos según Pekí­n y 203 según los exiliados), China desplegó importantes fuerzas de seguridad en la meseta tibetana.

El aniversario estuvo marcado por manifestaciones en todo el mundo. El Dalai Lama acusó a China de haber convertido al Tí­bet en un «infierno en la tierra» y de haber matado a «cientos de miles de tibetanos».

Wen llamó al mismo tiempo a Francia a adoptar una posición clara sobre el Tí­bet con el fin de restaurar las buenas relaciones bilaterales después del enfriamiento provocado por un encuentro entre el presidente francés Nicolas Sarkozy y el Dalai Lama en diciembre.

«Esperemos que Francia pueda adoptar una actitud clara sobre la cuestión del Tí­bet con el fin de restaurar lo antes posible las relaciones entre China y Francia», dijo Wen.

«Tibet es parte inalienable de China, el problema tibetano pertenece a los asuntos internos de China», afirmó asimismo el números dos chino.

«El Dalai Lama recorre el mundo y llega a desorientar a ciertos polí­ticos, ciertos paí­ses occidentales lo utilizan», afirmó el primer ministro chino.

«El Dalai Lama no es un simple religioso, es un exiliado polí­tico, lo demuestran los hechos», concluyó.