Primer acusado por caso Litvinenko


Resultados. En conferencia de prensa el fiscal Ken Macdonald (D), anunció los resultados de la investigación.

La fiscalí­a británica anunció hoy que acusará al ex agente del KGB Andrei Lugovoi y pidió su extradición a Gran Bretaña por el asesinato del ex espí­a y opositor ruso Alexandre Litvinenko el pasado noviembre en Londres.


«He concluido hoy que las pruebas aportadas por la policí­a son suficientes para acusar a Andrei Lugovoi por el asesinato de Litvinenko por envenenamiento deliberado», declaró el director del Crown Prosecution Service (CPS), Sir Ken MacDonald.

MacDonald también señaló que pidió a sus servicios que iniciaran los trámites para obtener su extradición.

Rusia ya habí­a anunciado anteriormente que se opondrí­a a la extradición de uno de sus ciudadanos en este caso y lo reafirmó este martes, a pesar de que la ministra británica de Relaciones Exteriores pidió a Moscú «plena cooperación» en este caso.

Alexandre Litvinenko, 43 años, un decidido opositor al régimen del presidente ruso Vladimir Putin, falleció en Londres el 23 de noviembre de 2006, tres semanas después de haber percibido los primeros sí­ntomas de un envenenamiento con polonio 210, sustancia altamente radioactiva.

La decisión de la fiscalí­a de procesar a Lugovoi afectará todaví­a más a las relaciones ya sumamente tensas entre Rusia y Gran Bretaña.

«Fue un crimen serio. Buscamos y esperamos la plena cooperación de las autoridades rusas» para que Lugovoi comparezca ante la justicia británica, declaró Beckett a través de un comunicado.

La fiscalí­a general rusa reaccionó de inmediato y descartó esta posibilidad.

«Según la Constitución de la Federación de Rusia, los ciudadanos rusos no pueden ser extraditados a paí­ses extranjeros para ser juzgados y Lugovoi es un ciudadano de Rusia», declaró una fuente de la fiscalí­a rusa citada por la agencia Ria Novosti.

Andrei Lugovoi, con otros dos hombres, Dimitri Kovtun y Viacheslav Sokolenko, se reunió con Litvinenko tres semanas antes de su muerte. Siempre ha negado tener algún ví­nculo con este deceso.

Sin embargo, dejó detrás de él restos de polonio en varios lugares de la capital británica, así­ como en un avión que tomó.

El 1 de noviembre de 2006, Alexandre Litvinenko tomó un té con Lugovoi y Kovtun en el hotel Millennium del centro de Londres.

El ex espí­a empezó a sentirse mal ese mismo dí­a, después de haberse reunido con un contacto italiano en un restaurante japonés cercano al hotel.

El ex agente ruso también se entrevistó brevemente con Viacheslav Sokolenko en ese hotel donde los investigadores encontraron igualmente rastros de polonio en algunos empleados del establecimiento.

Las relaciones entre Londres y Moscú se deterioraron claramente desde el asesinato no esclarecido de Litvinenko y la negativa del gobierno de Tony Blair a acceder a la petición de Rusia de extraditar al oligarca ruso Boris Berezovski, férreo opositor a Putin exiliado en la capital británica.

Alega inocencia

El ruso Andrei Lugovoi, acusado por la justicia británica de la muerte del ex espí­a ruso Alexandre Litvinenko, negó hoy los cargos y prometió declaraciones «sensacionales», según la agencia de noticias Interfax.

«Creo que se trata de una decisión polí­tica, yo no maté a Litvinenko, no tengo ninguna relación con su muerte y tengo motivos para desconfiar de las supuestas pruebas reunidas por la justicia británica», afirmó Lugovoi, citado por las agencias rusas.