Nokia Corp. lanzó ayer sus primeros teléfonos celulares con plataforma Windows, con la esperanza de recuperar la participación de mercado que perdió en el segmento de smartphones ante rivales como Apple Inc., Samsung y el sistema operativo Android, de Google.
Pero algunos analistas consideran que podría ser una medida tardía e insuficiente por parte del mayor fabricante de teléfonos del mundo.
Con precios de 420 y 270 euros (580 y 370 dólares), los modelos Lumia 800 y 710 se basan en el programa Windows 7 de Microsoft Corp., y salen al mercado ocho meses después de que Nokia y el gigante de la computación dijeron que unirían fuerzas.
«El Lumia es razonablemente bueno… pero no es superior al iPhone», dijo Neil Mawston, de Strategy Analytics. «Donde Nokia sí se distingue es en el precio. Parece que van a ser muy competitivos».
El Lumia 800, con lente Carl Zeiss y memoria interna de 16 GB, se venderá en algunos países de Europa desde noviembre, incluyendo Francia, Alemania, Italia, Holanda, España y Gran Bretaña. Llegará a otros países para fin de año.
El Lumia 710, con procesador de 1,4 GHz, funciones de navegación y la aplicación gratuita Nokia Music, debutará en los mercados de Hong Kong, India, Rusia, Singapur y Taiwán hacia fin de año.