La Pastoral de Movilidad Humana de la Diócesis de San Marcos y la Casa del Migrante de Tecún Umán, municipio de Ayutla, preparan una posada navideña para recordar a los viajeros y dar continuidad al proceso de concientización para que las autoridades y las comunidades nacionales e internacionales cambien de actitud con respecto a los migrantes, que merecen consideración y apoyo.
Celeste Orozco, coordinadora de la entidad eclesiástica, expresó que la posada en referencia es la número 16 que se realiza desde que la Casa del Migrante surgió en 1995, junto al río Suchiate del citado lugar fronterizo y es la segunda que se celebra en el paso conocido como El Carmen, del municipio de Malacatán, que se localiza a 59 kilómetros de la cabecera departamental.
La celebración se lleva a cabo el próximo 14 de diciembre, la que contará con la presencia de las principales autoridades y la participación masiva de los habitantes de las poblaciones asentadas en la región fronteriza de Guatemala y México; se prevé realizar una caminata que cruzará la frontera de Talismán, siempre que el Delegado del Instituto Mexicano de Migración facilite el ingreso de personas participantes, dijo Orozco.
El evento tendrá como lema “Deportaciones e indiferencia, una llaga debe ser sanada”, que responde claramente a la situación penosa, humillante, de discriminación, que afrontan los migrantes cotidianamente; el irrespeto a su dignidad como ser humano se manifiesta en las deportaciones; en lo que va del año se contabiliza un total de 46 mil 600 procedentes de los Estados Unidos y México, aseguró la representante.
La entrevistada destacó que por esa misma razón los organizadores de la actividad emitirán un comunicado a la opinión pública nacional e internacional, para denunciar la criminalización y el maltrato que sufren las personas en el extranjero, así como rechazar las políticas migratorias que son injustas, inhumanas y racistas, que imperan y se practican en los países de origen, tránsito y destino.
En la medida que se incrementa el flujo migratorio, aumenta la violencia cometida por las autoridades y por los grupos delincuenciales organizados que proliferan en las rutas de los países de tránsito, quienes constantemente perfeccionan sus métodos con mayor crueldad que utilizan en los secuestros, asaltos, extorsiones y asesinatos, hechos que constituyen una práctica recurrente, indicó.
Esta actividad pública que se lleva a cabo en una época del año en la que debe reinar la paz y la felicidad en los hogares, pretende contribuir al logro de la comprensión hacia las personas que dejan la familia y el solar patrio y a la promoción de acciones y políticas orientadas a la protección, defensa y respeto a los derechos de la población en movimiento, concluyó Orozco.