El 7% de las muertes maternas ocurridas en 2006 en México fueron causadas por abortos, índice 1,4% menor al registrado en 1980, informó ayer el ministro de Salud del país, José Angel Córdova.
«En 1980 las muertes por aborto representaban el 8,4% del total de las muertes maternas, cifra que disminuyó en el 2006 a un 7%», expresó el funcionario, quién detalló que en 1980 de las 2.296 muertes maternas registradas, 194 fueron por aborto, mientras que en 2006 los decesos relacionados con el embarazo ascendieron a 1.190, de los cuales 83 fueron por abortos.
Córdova no distinguió si los abortos que provocaron el año pasado los 83 fallecimientos fueron inducidos o espontáneos.
Ante la polémica desatada en el país por un proyecto legislativo que permitiría la interrupción del embarazo en la Ciudad de México, el cual se prevé aprobar en abril próximo, el secretario de Salud afirmó que esa dependencia intenta reforzar sus programas de planificación familiar.
El reto «será reforzar en las entidades federativas (estados), los programas de planificación familiar, para que las parejas conozcan y utilicen libremente los métodos», apuntó.
En la última semana, la Iglesia católica y el gubernamental Partido Acción Nacional (PAN, derecha) emprendieron una fuerte cruzada contra dos proyectos legislativos para despenalizar el aborto en México, impulsados por los principales partidos de oposición.
La primer iniciativa autorizaría el aborto en la capital mexicana, gobernada por el izquierdista Partido de la Revolución Democrática, en tanto que en el Senado federal la izquierda también encabezaría una propuesta similar.
Según cálculos del gubernamental Consejo nacional de Población, cada año se practican en este país alrededor de 102 mil abortos clandestinos, aunque las Organizaciones No Gubernamentales elevan la cifra a 500 mil.
Solo en la Ciudad de México anualmente unas 3 mil mujeres mueren a consecuencia de abortos mal practicados, de acuerdo con datos de la Asamblea de la Ciudad de México, que justifican la iniciativa.