Luego de la aprobación de la emisión de Bonos del Tesoro que se diera ayer por la noche en el Congreso de la República, el sector empresarial ve con preocupación que no se ha fijado el techo presupuestario, ya que el «Gobierno hace y deshace cosas en el presupuesto sin tener un techo», además continúan sin apoyar a la que denominan «reformita».
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Carlos Amador, presidente del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales y Financieras (Cacif), señala que es importante, luego de esta aprobación, dar prioridad al tema del techo presupuestario no mayor a los Q48 mil millones, y que este debe quedar establecido en las próximas reuniones de la mesa.
Por otro lado, Armando Boesche, gerente de la Asociación de Azucareros de Guatemala (Asazgua), y representante del sector empresarial en la mesa de diálogo sobre temas fiscales, asegura que es preocupante que «uno de los principales problemas es que se están haciendo y deshaciendo cosas dentro del presupuesto sin que se defina el techo presupuestario».
Además, sobre las recomendaciones que realizara el Fondo Monetario Internacional sobre la urgente aprobación de la reforma fiscal, Amador señala que el Cacif continúa con la postura de no apoyar esta aprobación e indica que en dicha recomendación también se asegura la necesidad de fijar un techo presupuestario.
DECISIONES
La ley de emisión de Bonos del Tesoro por Q4mil 500 millones fue aprobada con 105 votos a favor y 20 en contra; al mismo tiempo, se aprobó un fondo de revisión que elimina la discrecionalidad de la Comisión de Finanzas del Congreso sobre la ejecución de Q320 millones para obras de los Consejos de Desarrollo.
El representante de Asazgua indica que «es delicado» que el Congreso decida finalmente sobre las propuestas del Ejecutivo, pues prácticamente se han transferido las decisiones y la política de gobierno en relación a infraestructura y endeudamiento.
Armando Boesche, gerente de Asazgua.