Sé la expresión viviente de la bondad de Dios; bondad en tu rostro, bondad en tus ojos, bondad en tu sonrisa, bondad en tu cálido saludo»:
Madre Teresa de Calcuta.
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Continuando con la profesionalización de los trabajadores  del Hospital Roosevelt el doctor Guillermo Echeverría, viceministro de Salud Pública y Asistencia Social, cuando era director del hospital  introdujo un diplomado en Salud y Derechos Humanos, el que está por llegar a su fin.
 Los organizadores  no   podían dejar  de conocer la situación por la que atraviesan los usuarios del trasporte urbano y extraurbano ante la falta de seguridad de  las  unidades y las repercusiones en el campo de la salud, así que invitaron al señor í‰dgar Guerra, presidente de la Asociación de Usuarios del Trasporte Urbano y Extraurbano, para compartir con él sus experiencias y conocimientos.
El señor Guerra  explicó cómo los usuarios del transporte público sufren de estrés debido a la inseguridad por los asaltos y otros delitos que se cometen dentro de los autobuses.
Pero también indicó que los conductores de las unidades de transporte se han convertido en enemigos de los usuarios, a quienes tratan con muy malas maneras exigiéndoles «abarrotar» los autobuses, realizando cobros extras a los establecidos y conduciendo con los radios encendidos con música estridente.
La mayor carga de agresión, según Guerra, la sufren los adultos mayores, por lo que en busca de apoyo acudieron a la Gobernación departamental de Guatemala, en donde las puertas se les abrieron, y lograron conseguir que el Gobernador, licenciado Erick Pocasangre, imprimiera 30 mil folletos informativos que están siendo distribuidos a los usuarios del transporte urbano y extraurbano. Los mismos incluyen información sobre los requisitos para realizar una denuncia al teléfono 5920 7074  indicando que se debe anotar: el número de placa del autobús infractor,  el número de ruta que cubre el mismo, la hora del incidente y la fecha en que se produjo. Datos que servirán a la asociación para realizar la investigación del caso y actuar como consideren apropiado.
El señor í‰dgar Guerra manifestó sentirse muy agradecido con el licenciado Pocasangre, quien, según dijo, se ha preocupado mucho por brindar atención a los adultos mayores.
 Y a quien se le hace difícil entender cómo luego que el Estado paga por el pasaje de los adultos mayores y ellos  presentan su respectivo carné, son maltratados, llegando al punto en que los conductores no les paran o les tiran sus identificaciones, provocando inconvenientes.
Agregando que de ser posible los adultos mayores viajen acompañados y que todos los usuarios del transporte público permanezcan  alertas y denuncien las situaciones anómalas.