El premio otorgado ayer a tres reclusos, entre ellos un ex guerrillero del MRTA y otro de Sendero Luminoso, en un concurso literario para presos, quedó marcado por la polémica luego de que no se permitiera la premiación en la sede que alberga la Feria Internacional del Libro, de Perú.
La controversia surgió por la negativa de un exclusivo centro comercial, donde anualmente se celebra la Feria Internacional de Lima, a permitir la premiación de los reclusos.
Estos son Alberto Gálvez Olaechea, quien integró la cúpula del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru, Juan Aranda Company, militante de la agrupación maoísta Sendero Luminoso (SL), y Julio Rodríguez Delgado, quien cumple reclusión por robo.
La postura del centro comercial Jockey Plaza Shopping Center fue calificada como «discriminatoria e intolerante» por los organizadores de la Feria del Libro y por la estatal PetroPerú, que auspició el concurso literario.
No obstante, los premios fueron entregados de todas maneras en otro lugar, en el auditorio de PetroPerú, cuyo presidente, César Gutiérrez, lamentó los «desentendimientos» con los dueños del complejo comercial, posición que compartió la ministra de Justicia, Rosario Fernández, que asistió al acto.
El concurso de cuento «Arte y Esperanza», organizado por la Asociación Dignidad Humana y Solidaridad, fue ganado por Gálvez Olaechea, quien ya cumple 20 años de cárcel de una condena a 24.
«Es un caso de intolerancia. La gran estrategia debería ser recuperar a los internos antes de proscribirlos», dijo el ex emerretista al subrayar que «poner fosas entre las personas puede aumentar la agresividad». Sin embargo, prefirió no dar importancia a la actitud del centro comercial.
Gálvez Olaechea, quien dijo que ha reflexionado en prisión y que ya no es partidario de la lucha armada, escribió el cuento «El Chato» (hombre de baja estatura) que narra la vida «difícil y áspera» en una celda de dos presos, uno del MRTA y otro de SL.
En las dos últimas dos décadas ambos grupos desencadenaron una guerra contra el Estado peruano en busca del poder y siempre estuvieron distanciados por irreconciliables posiciones políticas.
El segundo lugar lo obtuvo Aranda Company, condenado a treinta años por su vinculación con Sendero Luminoso, de los cuales ya cumplió la mitad. El es autor de «Hipopótamos», calificado como un relato de corte surrealista.
«Nos hemos pasado 20 años en el conflicto interno, 20 años en juicios que aún no acaban y van a pasar otros 20 años para reconciliarnos; eso es un absurdo; la reconciliación debe empezar ya viendo el futuro y no el pasado», dijo al precisar que ahora es partidario de la democracia y la reconciliación.
Rodríguez Delgado, quien saldrá en libertad la próxima semana tras quince años de cárcel por robo, escribió «El Chacal», sobre su experiencia de pescador.
Los galardones fueron entregados en una ceremonia que contó con una discreta vigilancia de miembros del Instituto Nacional Penitenciario y de efectivos policiales.
El conflicto interno por las acciones armadas de Sendero Luminoso y del MRTA dejó un saldo de 70 mil muertos y desaparecidos, según la Comisión de la Verdad.