Las formas de vida, de cultura y las economías de la población poqomam, ubicada en Santa Cruz Chinautla, a unos 15 kilómetros de la metrópoli guatemalteca, se ven afectadas debido a la precariedad ambiental y sanitaria en la que se encuentran; una buena parte de desechos y aguas negras de la ciudad, han quedado rezagadas en el centro urbano.
En conferencia de prensa, lideresas comunitarias dijeron que durante aproximadamente dos años han gestionado espacios de interlocución con el gobierno central, las municipalidades de Guatemala y Chinautla, pero sus peticiones han sido ignoradas e incluso han sido víctimas de expresiones de discriminación y exclusión.
La situación es crítica; en la localidad fluyen los ríos Chinautla, Las Vacas y Tzaljá, sus márgenes están totalmente cubiertas de desechos que emanan olores fétidos, la calidad de vida se degrada rápidamente sin que las autoridades atiendan el llamado de las personas, dijo a Cerigua Rosa Gallardo, de Mujeres en Resistencia.
En el 2007, a raíz del hundimiento que se registró en el Barrio San Antonio, zona 6 de la capital, donde perdieron la vida cuatro personas, la Municipalidad de Guatemala desvió parte de los desechos del Colector Poniente hacia el Río Las Vacas; actualmente la población sufre las consecuencias ambientales y sanitarias, que se agravan cada día, agregaron las conferencistas.
La tormenta Agatha, que impactó en Guatemala el 27 de mayo del presente año, empeoró el estado de la infraestructura y conllevó graves consecuencias para la economía local, que subsiste de la alfarería y de la elaboración de otras artesanías, actividad que desarrollan principalmente las mujeres.
La comunidad de Santa Cruz Chinautla hizo un llamado a las autoridades para que atiendan las situaciones e implementen los proyectos necesarios para mejorar la calidad de vida de las personas y prevenir pandemias sanitarias derivadas de la contaminación.