Planeta de órbita de un dí­a


Un planeta con una masa diez veces mayor que la de Júpiter y que orbita alrededor de su estrella en menos de un dí­a terrestre, fue descubierto por un equipo internacional de astrónomos, según un estudio publicado ayer.


El planeta WASP-18b, que apenas necesita 0,94 de un dí­a terrestre (algo menos de 23 horas) para completar un giro alrededor de su sol, corre el riesgo, explican los astrónomos, de caer rápidamente –es decir, en un millón de años– sobre su estrella, que tiene una edad de aproximadamente mil millones de años.

La «corta vida» que le queda al planeta, que apenas representarí­a «un milésimo de la vida de su estrella», sorprende a los astrónomos, según el estudio que publica la revista cientí­fica británica Nature.

Los investigadores se interrogan sobre la dimensión real de la fuerza de mareas que, según sus cálculos, llevarán a esa rápida colisión.

Unos 375 exoplanetas han sido descubiertos hasta ahora, pero las particularidades de WASP-18b, tan masivo y tan cerca de su estrella que queda sometido a importantes fuerzas de marea, intrigan a Coel Hellier (de la británica Keeler University) y sus colegas. Se tratarí­a del primer «Júpiter caliente» que orbita alrededor de su estrella en menos de un dí­a.

La categorí­a de planetas extrasolares llamados «Júpiter calientes» corresponde a los planetas masivos –como el Júpiter de nuestro sistema solar– que al parecer se formaron lejos de su estrella y luego se fueron acercando.

La distancia entre WASP-18b y su sol corresponde a tres veces el diámetro de la estrella. En comparación, la Tierra está a unos 150 millones de kilómetros del Sol, es decir, más de cien veces el diámetro solar.

WASP-18b, que gira alrededor de su estrella más rápidamente que esta lo hace sobre si misma, está sometido a una fuerza de marea tal que su trayectoria se irá cerrando progresivamente en una espiral que lo llevará hasta ese choque estelar final.

Los efectos de marea entre la Tierra y la Luna también tienden a modificar la trayectoria de nuestro satélite, pero en sentido inverso. Como la Luna necesita más tiempo para completar una órbita alrededor de la Tierra que el que emplea nuestro planeta para girar sobre si mismo, la Luna se aleja progresivamente de la Tierra, explican los investigadores.

Otra particularidad detectada por los astrónomos es que la estrella tendrí­a una edad de entre 500 millones y 1.500 millones de años, por lo que es «una de las más jovenes estrellas conocidas por tener un planeta».

La caí­da final del planeta podrí­a además, según el equipo de cientí­ficos, acelerar fuertemente la rotación de la estrella, para llegar a completar un giro sobre su eje en 0,7 de dí­a terrestre, en lugar del 5,6 empleado actualmente.