Plan de gobierno:


«Tenemos que entender que hay que trabajar por el capital humano, la inversión vendrá si logramos desarrollar ese capital», manifestó Fritz Garcí­a-Gallont, candidato presidencial del Partido Unionista, quien junto a Enrique Godoy, su compañero de fórmula; el diputado Mariano Rayo y Héctor Morales delinearon su programa de gobierno al Consejo Editorial de La Hora Polí­tica.

Lucy Barrios
lahora@lahora.com.gt

Si bien en la administración de ílvaro Arzú se dio prioridad a la infraestructura, los unionistas dan un giro hoy y le apuestan a trabajar por el ser humano; de ganar las elecciones, su prioridad será educación y salud, mediante la creación de «la remesa escolar» y el seguro médico.

«En la década pasada, los partidos de derecha consideraban que haciendo la infraestructura básica, los procesos de desincorporación y dando certeza al inversionista iba a existir desarrollo por obra y gracia del Espí­ritu Santo; sin embargo, eso ha hecho crecer la brecha entre el más rico y más pobre y aunque el unionismo sigue creyendo en esas tres premisas, tratamos de regresar a la importancia de la persona, buscando jalar al segmento de la población que se quedó desvinculado del desarrollo, afirmó Enrique Godoy.

Unido a ello, ven que con la firma del Tratado de Libre Comercio la inversión vendrá al paí­s y lo primero que verá es a nuestra gente, la mano de obra no es calificada por lo que se hace necesario trabajar en su capacitación para lograr mejor remuneración.

Mil millones para remesa escolar

De esa cuenta, buscan crear la remesa escolar, que consiste en apoyar económicamente a los padres de bajos recursos a cambio de que sus hijos vayan a estudiar, ya que la educación sigue siendo un tema difí­cil, particularmente en el área rural donde la mayorí­a de padres ocupan a sus hijos en las tareas del campo si son hombres, o domésticas si son mujeres.

Explican que paí­ses como Brasil la han aplicado de forma asombrosa, logrando coberturas mucho más importantes y evitando la deserción escolar. El niño tiene que tener una asistencia mí­nima a clases del 85% y un promedio de 67 puntos.

Al ser consultados respecto al costo, Garcí­a-Gallont dijo que cuando un gobierno unionista dice que la educación va a ser su prioridad, lo debe reflejar en el presupuesto: se necesitan aproximadamente mil millones de quetzales, un 2% del Presupuesto General de la Nación.

¿Sustituirí­a el desayuno y la galleta escolar?

La propuesta no sustituye la refacción escolar, dice el candidato presidencial, pese a que es un esfuerzo que llega probablemente al 50% de los estudiantes. Al igual que la galleta, ese programa hay que reforzarlo y ampliar Creciendo Bien.

«Estamos hablando de una inversión en el activo más grande que tiene el paí­s: sus niños, sus jóvenes. La polí­tica estarí­a condicionada a un proyecto de nutrición y de salud generada desde la escuela para que ésta se convierta en el centro de desarrollo de la comunidad», aseguró Enrique Godoy.

Según el unionismo, en el futuro se tendrí­a niños mejor educados, pero en el presente los padres de familia podrí­an salir de la pobreza extrema en que se encuentran, tener acceso a más y mejores servicios, se romperí­a el cí­rculo de pobreza y se empezarí­a a impulsar el desarrollo local.

Seguro de salud masivo

En materia de salud pública, ofrecen cobertura a través de un seguro masivo público y voluntario que proteja a todos los guatemaltecos, sobre todo desde el momento que nacen. Explican que aun cuando la salud pública por mandato constitucional es gratuita, el Estado no está en capacidad de cubrir el ciento por ciento de la necesidad y la gente solo da un paso fuera del hospital San Juan de Dios y sabe que todo lo paga.

El planteamiento implica establecer un catálogo mí­nimo de intervenciones a cubrirse, al inicio serí­an 75 y un acceso a 200 medicamentos, privilegiando el tema de los genéricos; se harí­a una evaluación socioeconómica para determinar la capacidad de pago, los que están en extrema pobreza serí­an absorbidos por el Estado.

La base principal de los problemas es la miseria, la falta de tenencia de la tierra, la inseguridad social, familiar, la salud. ¿Cómo pueden afrontar y empezar a resolver esos graves problemas que nos azotan?

«Nosotros hemos tenido oportunidad de hacer cosas, el municipio de Guatemala es la expresión de una continuidad, de la acumulación de una experiencia de éxitos, fracasos y más. El estudio de la realidad nacional es nuestro fundamento, las propuestas no parten de etéreo, de un libro de texto o porque el Fondo Monetario Internacional nos lo dijo, nosotros planteamos cosas sobre la base de la realidad, expresa Mariano Rayo.

Los unionistas manifestaron que para poder hacer crecer a un paí­s se necesitan dos zapatos: el capital o inversión que genera los puestos de trabajo y el capital humano. La inversión busca certeza jurí­dica, infraestructura, seguridad y elemento humano capacitado, difí­cil de encontrar en Guatemala. Unido a ello, se tiene la energí­a más cara a nivel mesoamericano y en el tema de los impuestos nos vanagloriamos de hablar de una tasa del Impuesto Sobre la Renta del 32%, como diciendo vamos a hacer que los que tienen paguen más. «Eso es mentira, aquí­ son contadas con los dedos de la mano las empresas que pagan el 32%, eso es cuestión de un contador hábil que haga los ajustes de la contabilidad pero al capital internacional no se le puede decir que será el contador quien le arreglará para terminar pagando 15%», afirmó Garcí­a-Gallont.

¿Qué hacer con el dilema de integrar la diversidad sociocultural?

Agrega que el Estado tiene que cambiar su relación con el sector indí­gena. Primero trató de ladinizar a la Guatemala, después ha hecho esfuerzos timoratos por darle espacios a los indí­genas. Si nuestra agrupación polí­tica firmó los Acuerdos de Paz, nuestro fundamento para actuar en el tema de etnicidad es seguir construyendo sobre lo que ya se ha alcanzado y retomar las propuestas que desde el mismo sector están surgiendo.

¿Qué los motivó a participar?

Fritz Garcí­a: Porque soy un guatemalteco profundamente enamorado de Guatemala, quiero un paí­s mejor, no solo para mis hijos, sino para los hijos de todos los guatemaltecos.

Enrique Godoy: Mi familia ha participado en polí­tica desde hace más de 140 años, desde Miguel Garcí­a Granados pasando por Jorge Garcí­a Granados, su nieto y presidente de la Constituyente del 44-45. De alguna forma, uno va trayendo eso adentro. Muchos nos quejamos siempre de los males del paí­s, pero pocos se atreven a dar el paso de tratar de hacer algo.

Impuesto del 15% sobre ganancias.

En materia de impuestos, los unionistas proponen una reforma que permita pagar una tasa flat sobre ganancias del 15% e indican que no es conveniente estar cambiando, cada cuatro años, la materia tributaria. Hay que entender que la solución está sólo en ampliar la base tributaria, buscar que todos paguen y no solo el pequeño grupo que está formalmente involucrado en la economí­a nacional. Guatemala necesita más ingresos pero tiene que ser justo para todos.

Seguridad, lo urgente

pero no lo importante

Los unionistas plantean tres objetivos estratégicos para desarrollar una polí­tica frontal de ataque contra la delincuencia y garantizar la aplicación de la justicia:

1.) Consolidar la presencia y recuperar el control de la autoridad del Estado en todos los municipios del paí­s

2.) Protección de la población.

3.) Eliminación del comercio de drogas ilí­citas.

El esquema de mano dura de los patriotas lo critican porque es retroceder al pasado, igual lo hacen con seguridad total de la GANA, partido del que dicen su materia más reprobada es la seguridad. Según ellos, se debe nombrar en el municipio a agentes de la localidad y hablan del último eslabón de la justicia: el sistema penitenciario declarado en estado de calamidad.

Agenda legislativa contra la corrupción

Partiendo de que un Presidente honrado que castiga severamente a los funcionarios que incumplen la ley, es el mejor antí­doto para un gobierno transparente, ofrecen una lucha frontal contra la corrupción que incluye la revisión de la legislación existente y la creación de otra.

A las leyes de Probidad y Responsabilidad de funcionarios públicos, de la Contralorí­a General de Cuentas, la Ley Electoral y de Partidos Polí­ticos, proponen modificarlas. De igual forma, el Código Penal y Procesal Penal; así­ como sustituir la Ley de Tribunales de Cuentas, que data de finales de los años 40.

Plantean la necesidad de reincorporar al sistema jurí­dico penal los compromisos internacionales ya firmados, la creación de una unidad de inteligencia financiera al estilo de la Instancia de Verificación Especial de la Superintendencia de Bancos con el propósito de rastrear la corrupción. Proponen mejorar el SIAF, ampliar Guatecompras para determinar qué pasa después de la adjudicación de un contrato.

Reformar la Constitución, un peligro

Para los unionistas, reformar la Constitución de la República es peligroso por el manipuleo y negociaciones muy complicadas que se dan. Agregan que todos los que están ofreciendo la reducción del Congreso son unos mentirosos y oportunistas. «El mismo ofrecimiento lo hizo Berger e incluso planteó una consulta popular a medio término que de concretarse los hubiera dejado sin bancada y sin Presidente», dicen.

Enrique Godoy considera que reducir el número de diputados se puede hacer hoy mismo con una propuesta firmada por 10 representantes solicitando la reforma a la Ley Electoral en su artí­culo 205, no tienen que esperar hasta después de las elecciones.

Dicen estar de acuerdo en definir un número fijo de diputados como funciona en Estados Unidos, distribuida de acuerdo a los empadronados por distrito y dejando la lista nacional. Si se hablara de 125, 100 serí­an por distrito y 25 por lista nacional. De no ser así­, según ellos, no se resuelve el problema y en determinado momento puede representar carencia de representatividad, impulsar el bipartidismo.

Además

Energí­a y combustibles: Al mercado de la energí­a eléctrica tenemos que ordenarlo y a nivel de carburantes se han dado abusos de las transnacionales y el Estado ha sido incapaz de poner orden.

Los migrantes: El mayor producto de exportación son los guatemaltecos que se van a Estados Unidos, pero si logramos tener mano de obra mejor calificada la inversión va a venir a Guatemala y tendremos mejores oportunidades.

Ideologí­a: Libertad en orden. El ser humano debe desarrollarse en libertad que le da la plurietnicidad, pero en orden.

No hay presencia del Estado: Cuando se replegó a la autoridad del Estado dejamos vací­os y hoy la anarquí­a y el narcotráfico prevalecen.

Estado inconcluso: Desde la conquista no se logró construir un Estado; tenemos una Constitución que no hemos terminado de desarrollar.

Los pesos y contrapesos: Los medios de comunicación cometen el error de satanizar las negociaciones cuando es normal, necesario y usual en la polí­tica democrática que se hagan de cara al sol

El TLC, ni panacea, ni entrada al infierno.

El Tratado de Libre Comercio firmado con los Estados Unidos no fue la panacea como algunos lo defendieron, ni la entrada al infierno como otros lo señalaron. Lo único que hemos logrado es recuperar levemente nuestra capacidad de exportación hacia EUA.