La Comisión Europea propuso inflingir sanciones progresivas a partir de 2012 a los constructores automotores que no alcancen sus objetivos de reducción de emisiones de CO2 para esa fecha, en una nueva iniciativa en el marco de su lucha contra el cambio climático.
Las sanciones serían de 20 euros por gramo de dióxido de carbono (CO2) adicional en 2012, 35 euros en 2013, 60 euros en 2014 y 95 euros en 2015, según la propuesta dada a conocer por Bruselas.
Según el proyecto de la Comisión, cada constructor que venda vehículos en Europa tendrá un objetivo de emisión específico para alcanzar una media global de 130 gramos de CO2 por kilómetro para el conjunto del parque automotor nuevo.
La Unión Europea se había comprometido en febrero pasado a que los vehículos nuevos vendidos en su territorio a partir de 2012 emitan una media de 120 gramos de CO2 (dióxido de carbono) por kilómetro, contra 160 actualmente.
Mientras que los constructores tendrán que reducir las emisiones del motor a 130 gramos, los restantes diez gramos se ganarán a partir de una mejora de los neumáticos, la creación de indicadores de cambio de velocidad o un mayor recurso a los biocarburantes.
El objetivo por constructor será establecido en función del peso de los vehículos vendidos, pero los productores de autos más grandes, y más consumidores de combustible, deberán hacer el esfuerzo más importante, precisó la Comisión.
La Comisión Europea tuvo que luchar hasta el final para conciliar los intereses divergentes de los constructores alemanes, franceses e italianos.
El debate oponía a los países constructores de vehículos pequeños menos contaminantes (Francia, Italia, España, Rumania), apoyados por los Estados miembros sin producción industrial, y aquellos productores de autos de gran cilindrada, todo terreno y deportivos más contaminantes (Alemania y Suecia).
Según un estudio de la ONG «Transporte y Medio Ambiente», los constructores franceses e italianos (PSA, Renault y Fiat) emitían en 2006 una media de 144 gramos de CO2 por km contra 173 g para los alemanes BMW, Volkswagen (Audi) y DaimlerChrysler (Mercedes).