Egipto y la Liga írabe llamaron el sábado al cese inmediato de los combates en Somalia, mientras las autoridades egipcias señalaban el peligro de que el conflicto somalí se transforme en una «guerra regional».
El ministro egipcio de Relaciones Exteriores, Ahmed Abul Gheit, pidió a los beligerantes en Somalia que «pongan fin inmediatamente a los combates y que detengan el derramamiento de sangre del pueblo somalí».