Picasso completamente erótico


Un hombre observa un dibujo, titulado

El Museo Picasso de Barcelona (noreste de España) expone por primera vez desde el jueves y hasta el 14 de febrero parte de la colección de estampas japonesas que sirvieron de inspiración al genial pintor Pablo Picasso para su pintura erótica.


Una mujer observa los dibujos de la exhibición. FOTO LA HORA: AFP LLUIS GENE

La exposición, titulada «Imágenes secretas», desvela el peso que tuvieron en el pintor malagueño 19 estampas japonesas de temática erótica de su colección particular, expuestas junto a los grabados de Picasso resultado de tales influencias.

Uno de los directores de la muestra, Malén Gual, explicó que tras una intensa tarea de investigación «detectivesca» se pudieron reunir 102 obras, entre las que destacan las 19 «shunga», como se llaman las estampas eróticas, que van de los siglos XVII al XIX.

A estas 19 piezas japonesas se unen, también por primera vez, 27 grabados y dibujos de Picasso donde queda claramente ilustrada la influencia japonesa, un arte al cual llegó a través de los franceses Henri Toulouse-Lautrec, Edgar Degas y Vincent Van Gogh, explicó el otro comisario de la muestra, Ricard Bru.

La exposición también incluye álbumes, catálogos, libros y documentos sonoros que ilustran la influencia del arte japonés en la Barcelona de principios del siglo XIX y en Picasso, un pintor «complejo y desordenado» sobre el cual todaví­a no se ha dicho todo, según aseveró el director del Museo, Pep Serra.

Entre las obras expuestas hay una que Bru calificó de «excepcional»: el grabado «Buceadora y el pulpo», de Katsushika Hokusaki, sobre la relación sexual entre un pulpo y una mujer, que Picasso versionó en 1903.

Esta obra forma parte del primer ámbito de la exposición, donde se explica el «japonismo» y su influencia en los artistas europeos de la época, y en otro apartado de la exposición puede verse la obra de Picasso con influencia japonesa.

Los grabados del pintor malagueño se han situado junto a estampas japonesas de Nishikawa Sukenobu y Torii Kiyonaga, entre otros, de las que Picasso absorbió los detalles de los japoneses centrados en los genitales de la pareja en el momento de la cópula.

La muestra, que perdurará hasta el 14 de febrero, no podrá ser expuesta en ningún otro sitio, dijeron los comisarios, debido a la fragilidad de las obras y las dificultades que por ello plantean los préstamos a otras entidades.