Orquesta del Río Infinito, Orquesta de la Papaya, Piano Malango, son algunas de las herramientas que ha creado el pianista costarricense Manuel Obregón para escarbar en las raíces musicales milenarias del continente y reunir a músicos latinoamericanos para mantenerlas vivas.
Pianista de formación clásica, su interés ahora está en recuperar la música y los instrumentos musicales de una región que se enriqueció durante miles de años con los intercambios migratorios y culturales.
«La música tiene ese elemento que permite compartir música de latitudes muy diferentes y no sentir esas diferencias», confiesa a la AFP poco antes de viajar a España donde esta semana actuará en Madrid y en la Expo de Zaragoza tanto en solitario, como con el grupo Malpaís, el más importante de Costa Rica.